El ajo es una planta de la misma familia que la cebolla y la cebolla blanca. Es cultivado en amplias zonas del mundo y muy utilizado en la cocina.
Este se usa principalmente para sazonar la comida y en diversas preparaciones, aunque también hay quienes lo consumen para mejorar o sanar de distintas enfermedades.
Publicidad
En ambos casos, es importante incluir el ajo en nuestra dieta. Según un estudio de la Organización Mundial de la Salud, este contiene un rango interesante de vitaminas del grupo B y vitamina C, así como diversos oligoelementos como calcio, hierro, magnesio, fósforo, sodio o zinc, muy beneficiosos para la salud.
Los beneficios de la cáscara del ajo para depurar tu sangre y rejuvenecer tu piel
En esto coincide la nutricionista Stephania Esparza, quien menciona que el consumo de ajo tienen diversos beneficios, entre los que se encuentran los siguientes:
Publicidad
- Reduce el colesterol.
- Contribuye a la prevención contra el cáncer.
- Se considera un antibiótico natural.
- Regula la presión sanguínea.
- Posee muchos antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres que promueven el envejecimiento y daño celular.
Ajo negro: qué es y los maravillosos beneficios de comerlo en ayunas
Pese a esto, debe tenerse en cuenta que en algunas personas el ajo puede resultar perjudicial, sobre todo si se consume en ayunas, indica la especialista.
Entre las personas que no están aptas para consumirlo están quienes padecen de colon irritable, colitis o gastritis, ya que podría generar un efecto negativo. El ajo podría inflamar el colon con la producción de gases, causar distensión abdominal y también cólicos.
¿Se debe comer crudo el ajo?
Como sucede con otros vegetales o frutas, al consumirlo sin cocción, el ajo conserva todos sus nutrientes y beneficios. Esparza afirma que, en muchos casos, el calor puede hacer que muchos alimentos pierdan su valor nutricional. Cuando alcanza una temperatura superior a 45 grados muchas de sus propiedades desaparecen.
Cómo tomar el té de cebolla con ajo para reforzar tus defensas
No obstante, si ha habido malestar al consumirlo crudo, o se padece de algunas de las enfermedades antes mencionadas, lo ideal será consultar con un profesional de la salud si es recomendable o no comerlo de esta forma. (I)