Las dos semanas de protestas y paralizaciones, en su mayoría promovidas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), ponen en aprietos a varios centros de refugio de animales silvestres del país. Varias instituciones han tenido que cerrar sus puertas y, en especial, su flujo de donaciones es casi nulo debido al cierre de carreteras.