Ante un sistema penitenciario ‘deficiente’, con infraestructura, equipamiento y tecnología “insuficiente, obsoleta e inadecuada” para la rehabilitación de los reclusos, el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) inició, en noviembre de 2021, un plan para reestructurarlo en un lapso de cuatro años, hasta diciembre de 2025, y con un presupuesto de $ 125,5 millones. Han pasado 16 meses y el avance del programa llega al 12 % e incluye obras concluidas y pagadas y otras contratadas y en ejecución.