El debate sobre el llamado a juicio político al ex contralor del Estado subrogante, Pablo Celi, sirvió de escenario para que todas las fuerzas políticas censuren y pidan sanciones al presidente de la Comisión de Fiscalización, Fernando Villavicencio (Concertación-PSE), por no presentar un informe al pleno recomendando el juicio y censura al ex funcionario.

Luego de doce horas de sesión y 31 intervenciones, el pleno de la legislatura por unanimidad de 134 asambleístas presentes resolvió llamar a juicio político a Pablo Celi de la Torre, por incumplimiento de funciones. La presidenta del Parlamento, Guadalupe Llori, tendrá que incluir en la agenda la interpelación en un plazo de cinco días.

Sin informe de Comisión, Pablo Celi será llevado a juicio en el pleno de la Asamblea Nacional

El olvido de parte del presidente de la Comisión de Fiscalización, Fernando Villavicencio, de notificar a la presidencia de la Asamblea Nacional el pedido de prórroga de cinco días para presentar el informe sobre el juicio Celi, copó el debate y el pleno se desbordó de calificativos: “inepto, negligente, mentiroso, ruin, truhan, miserable, sinverguenza”.

Darwin Pereira del movimiento Pachakutik lamentó que haya una Asamblea dedicada a corregir fallas de asambleístas ineptos que no dan la cara, que a la Comisión de Fiscalización no le pudo haber tocado el peor presidente.

Según el representante de Pachakutik, esta no es la primera vez que se discute un tema porque el presidente de la Comisión, Fernando Villavicencio, no lo pudo hacer bien o porque no sabe leer la Ley, o “será acaso de mandar a investigar si a lo mejor sus cuentas están engordando como lo denunciaba Santiago Cuesta, el año pasado”.

Que a él no le vengan con el cuento, añadió Pereira, que fue un error de la secretaria, “que pena que tengamos aquí asambleístas ruines, truhanes que se escudan en una mujer para decir que fue culpa de ella, cuando existe la prueba de que firmó el documento dos días después, eso debe ser investigado y sancionado”.

Que debe indignar a todos que un individuo “nos eche lodo con ventilador, diciendo que todo está mal y que él es el único iluminado; como aquí no hay iluminados como él, entonces, que se largue su casa, aquí está demás”, sentenció Pereira.

“Le vamos a tener que enseñar a respetar lo que es esta curul, que el pueblo nos dio con dignidad para que los defendamos, no para tenernos acusando al uno y acusando al otro, denuncia aquí denuncia allá; por último se ha ido en contra de la señora Presidenta de la Asamblea Nacional eso es ser miserable, sinvergüenza”, apuntó.

Pereira pidió información a la secretaría de la Asamblea si Villavicencio solicitó la palabra para intervenir, y secretaría certificó a las 18:38, que se inscribió a las 16:58, pero que luego retiró el pedido. Al ser consultado el asambleísta dijo que por elemental respeto debían conceder primero la palabra al presidente de la mesa.

Villavicencio más tarde publicó en sus redes sociales un video donde afirmó que en este primer juicio político de la nueva Asamblea Nacional que intenta dejar atrás la otra del 2%, y resulta que el interpelado no ha sido el corrupto PPL, Pablo Celi de la Torre.

Que la Asamblea se bautizó interpelando al presidente de la Comisión de Fiscalización, al que aportó con el 80% de la pruebas para este caso; y que ayudó al proponente del juicio, Juan Lloret (UNES), a armar las piezas del ajedrez; y que lo que pasó en la Asamblea es un linchamiento que configura y pone de cuerpo entero a la gran parte de la clase política corrupta.

Tildó de mentirosos a quienes afirman que no hay un informe sobre el juicio, pues seis horas se demoró la secretaría en leer las conclusiones de los informes presentados.

La sesión

La sesión del pleno 721 se instaló a las 08:32 del 11 de agosto, e inmediatamente se dio paso a la lectura del informe sobre las posiciones de los nueve integrantes de la Comisión de Fiscalización que procesaron la solicitud de juicio político planteada por el legislador, Juan Lloret, del bloque correísta Unión por la Esperanza. La lectura tomó seis horas, y luego de un receso, el pleno se reinstaló a partir de las 16:10 y concluyó a las 20:15.

En el debate sobre la interpelación Celi, los legisladores señalaron que la negligencia de Villavicencio debe ser observada por el pleno e inclusive el legislador, Ricardo Vanegas (PK), presentó una queja en contra del presidente de la mesa de Fiscalización, por falta grave y pidió la suspensión por 30 días, por haber sostenido que Vanegas, está vinculado con una empresa investigada por el caso de desvanecimiento de glosas.

La Comisión de Fiscalización no presentó un informe recomendando el juicio político debido a que secretaría de la mesa olvidó notificar la resolución del 30 de julio sobre el pedido de prórroga para presentar el informe respectivo; por lo que, se optó por aplicar el tercero inciso del artículo 82 de la Ley Orgánica de la Función Legislativa, que permite remitir un informe donde se detalle las posiciones de los asambleístas miembros de la Comisión para que sea el pleno el que resuelva ya sea el archivo o el juicio político.

Los legisladores que integran la Comisión de Fiscalización: Fernando Villavicencio (Concertación-PSE); Ana Belén Cordero, Marco Troya y Pedro Velasco (BAN); Soledad Diab (PSC); Roberto Cuero, Gabriela Molina y Comps Córdova (UNES); y, Bruno Segovia (exPK), coinciden en sus informes que el ex funcionario de la Contraloría debería ser llamado a juicio político, aunque no acogen todas las acusaciones planteadas por el interpelante correísta.

Debate

La mayoría de los discursos emitidos por los legisladores, dejaron de lado los cuestionamientos sobre el accionar del ex contralor, Pablo Celi, acusado de incumplimiento y arrogación de funciones, responsabilidad en el desvanecimiento de glosas y estar inmerso en el proceso penal sobre delincuencia organizada.

El debate se dirigió a reprender a Fernando Villavicencio, presidente de la Comisión de Fiscalización, por poner en riesgo que el juicio a Celi, pase al pleno por falta de un informe.

El asambleísta de Izquierda Democrática, Alejandro Jaramillo, fue el encargado de mocionar que el pleno llame a juicio político y censure a Celi, por convertir al órgano de control de los recursos estatales en un centro de operaciones delictivas, en el que entre otros actos repugnantes desvaneció glosas de varios funcionarios, contratistas y de actores políticos del país para solicitar sobornos a cambio de favorecerles con la impunidad; es decir, creo la enfermedad para luego cobrar por la cura, acentuó.

Jaramillo dijo que combatirán la corrupción desde los diferentes espacios legislativos aunque existan algunos asambleístas que se esmeran por desprestigiar y boicotear nuestra labor, por afectar la imagen de la Asamblea Nacional, que “ha pretendido con absoluto cinismo, pero afortunadamente sin éxito, viciar este juicio político por errores que son imperdonables”.

Juan Lloret (UNES), proponente del juicio, también cuestionó a Villavicencio y aseguró que lo único que tenía que hacer es armar el rompe cabezas con todos los nombres de la lista de Celi, pero que al final no se aprobó el informe. Lo que ahora hace la Asamblea es “salvar los muebles”.

Su coideario, Comps Córdova (UNES), dijo que está preocupado por los errores cometidos en la Comisión de Fiscalización frente a este juicio y que espera que no se vuelvan a repetir. Roberto Cuero también de UNES, señaló que el error de Villavicencio tendrá que censurarse, pero que no se puede estancar la Asamblea, que la imagen de la Asamblea no se recupera lanzando piedras entre los legisladores.

En cambio, Soledad Diab (PSC), tildó de mentiroso Villavicencio, por haber señalado en medios de comunicación que los socialcristianos no quieren enjuiciar a Pablo Celi, cuando precisamente el bloque de la lista 6, planteó en la Comisión de Fiscalización la necesidad de que continúe el juicio político en contra Pablo Celi, anotó. Para su coideario, Esteban Torres, también es imperdonable el error de Villavicencio.

A su tiempo, Ricardo Vanegas (Pachakutik), dijo que el presidente de la Comisión de Fiscalización cometió un horror al no presentar el informe sobre el pedido de juicio dentro del tiempo contemplado en la Ley, que esa es una falta grave y sugirió aplicar una sanción.

Cuestionó a Villavicencio por haber señalado públicamente que Ricardo Vanegas, está vinculado a una empresa que está siendo procesada por desvanecimiento de glosas, por lo que reveló que presentó ante la Presidenta de la Asamblea una queja en contra Fernando Villavicencio para que se sancione por falta grave y se lo suspenda por 30 días.

Igualmente, solicitó la separación de la Asamblea de uno de los asesores del asambleísta, Bruno Segovia (ex PK), que a su criterio se ha dedicado a mancillar la honra de varios legisladores, incluidos a los miembros de la Comisión de Fiscalización.

Diego Ordóñez (CREO-BAN), criticó que la sala se haya desviado del objetivo central que es llevar a juicio político a Celi, y se haya dedicado a atacar a la Comisión de Fiscalización y al presidente de la mesa.

Rafael Lucero, coordinador del bloque Pachakutik, también usó su tiempo para reprender a Villavicencio; “y decirle al Presidente de la Comisión de Fiscalización que no busque culpables donde no existen, mucho menos en la bancada del movimiento Pachakutik, porque si es que existen equivocaciones aprendamos a reconocer como hombres de bien que nos equivocamos”.

Dijo que Villavicencio en medios de comunicación trató de justificar lo que no pudo hacer, “y decirle, asambleísta Villavicencio no se escude en su secretaria, porque la firma electrónica es de la responsabilidad del dueño de la firma”.

Su coideario, Salvador Quishpe, dijo que la Asamblea perdió un día por un error de los que se creían los superdotados, por un error que le culpan a una mujer, “a tu taita le harás cojudo”, anotó. Qué hay a cambio de esto, preguntó Quishpe, de cuándo acá los superdotados se equivocan y le ponen entre dicho a la Asamblea, añadió.

Quishpe afirmó que él no ha corrido, como otritos que denunciaron alguna cosa y después andaban corridos y escondidos detrás de las faldas de mis hermanas mujeres se Sarayaku.

Mario Ruiz también de Pachakutik aclaró que los errores cometidos en el juicio a Celi, son del asambleísta Villavicencio, no de la Asamblea Nacional ni tampoco de la Comisión.

Que los asambleístas no pueden quedarse mudos frente a errores que se comenten dos veces y talvez premeditadamente, talvez de una forma cautelosamente planificada para echar lodo contra esta Asamblea Nacional y quede mal ante el pueblo ecuatoriano.

Otros asambleístas dijeron que les queda la duda qué va a pasar con el próximo juicio político en contra del Defensor del Pueblo, Freddy Carrión. (I)