En los casi ocho meses que la Asamblea Nacional lleva en funciones, tres asambleístas de los 137 se han visto obligados a dejar sus curules por varias semanas, dos legisladoras fueron suspendidas por sanciones derivadas de quejas de sus compañeros y denuncias de acoso laboral y el tercero por un presunto impedimento de ejercer cargos públicos que solucionó por la vía legal.