Tres bloques petroleros han sido afectados por la acción de comunidades indígenas quichuas y huaoranis en la provincia de Orellana, en el marco del paro organizado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).

PetroOriental S. A., operadora de los bloques 14 y 17 de la provincia de Orellana, informó que, desde las 14:00 del 13 de junio, algunas de sus locaciones petroleras fueron ocupadas “ilegalmente y mediante el uso de la fuerza por unas pocas personas de la etnia waorani de la comunidad Yawepare”.

Explicaron que los manifestantes han amedrentado a los técnicos, han incautado provisiones y alimentos y los han obligado a paralizar la actividad de ocho pozos y equipos, ubicados en las locaciones Nantu E y Campo Hormiguero.

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Las actividades en dichas zonas siguen paralizadas y no ha sido posible retomarlas incluso con el apoyo militar, ya que las vías de acceso han sido obstaculizadas con árboles y zanjas. Los vehículos del Ejército han sido inutilizados por el empleo de lanzas contra los neumáticos. La pérdida se estima en 1.400 barriles al día, que son equivalentes. Si se toma en cuenta que el crudo ecuatoriano puede estar en un promedio de $ 90 por barril, se estaría hablando aproximadamente de $ 1′260.000 diarios de pérdida.

La empresa dijo que esta situación ha sido notificada debidamente a las autoridades respectivas del Gobierno nacional, a fin de que se garantice la normal operación y el cumplimiento de sus contratos con el Estado ecuatoriano.

El lunes en las redes de la Confeniae (Confederación de Nacionalidades de la Amazonía Ecuatoriana) se reportó que comuneros de Orellana se habían tomado los bloques petroleros 14 y 16 en la parroquia Dayuma por parte de la nacionalidad huaorani.

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Ese día, también a través de un comunicado, la empresa Petrolia informaba que la estación de bombeo de Pompeya del bloque 16 tuvo que ser apagada por seguridad y que comunidades quichuas habían ingresado pacíficamente al sitio. Aunque en un momento se dijo que se estaba retomando el control del sitio en calma, este martes 14 de junio del 2022 se conoció que los manifestantes continúan en los alrededores de la estación y han exigido paralizar las operaciones normales de bombeo y calentamiento del crudo, que sirven para que el crudo llegue a Shushufindi. En este sentido, no han podido prender la bomba, bajo amenaza de que, si no obedecen, ingresarán y causarán problemas en las instalaciones y en los sistemas de comunicación.

Ramiro Páez, gerente de Petrolia, explicó que, a pesar de los inconvenientes y la paralización de esta bomba, han continuado con sus operaciones para que el crudo llegue a Shushufindi, gracias al uso de otra bomba ubicada a 40 kilómetros.

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De otro lado, algunos comuneros de la parroquia Aleandro Labaka, en Orellana, indicaron que, ejerciendo el derecho a la resistencia, habían apagado los generadores del pozo Indillana, vía Llawanga. (I)