En la ficción, una manzana envenenada fue la causa de la muerte de Blancanieves y en las novelas de Agatha Christie un olor a almendras amargas era el que percibían las víctimas antes de morir asesinadas.

En la vida real, ambas historias tienen un rastro de verdad, porque ciertamente algunas frutas tienen en sus semillas algunas sustancias tóxicas que pueden ser venenosas.

Todos saben que las frutas, al igual que las verduras, no deben faltar en una dieta saludable; sin embargo, pocos conocen que algunos de estos espléndidos regalos de la naturaleza contienen en sus semillas una sustancia peligrosa que podría ser letal: la amigdalina.

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Esta sustancia “es un glucósido cianogénico natural que se encuentra en las semillas de algunas plantas comestibles, como las almendras amargas y los melocotones”, define la Biblioteca Nacional de Medicina, de Estados Unidos.

La amigdalina en contacto con las enzimas del estómago se convierte en cianuro, un conocido veneno.

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La ingestión de 50 semillas de manzana o pera, o de la parte carnosa de 30 huesos de melocotón, albaricoque o ciruela, pueden causar la muerte en un adulto. Foto: milanvirijevic

Cuáles frutas tienen semillas tóxicas

Entre las frutas con semillas tóxicas o venenosas están las manzanas, peras, cerezas, melocotones y albaricoques, estas dos últimas son las que tienen mayor cantidad de amigdalina, reseña El Español.

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Según se estima, “…La ingestión de 50 semillas de manzana o pera, o de la parte carnosa de 30 huesos de melocotón, albaricoque o ciruela, pueden causar la muerte en un adulto”, apunta Consumer.

En todas estas frutas, al igual que en las almendras amargas, está presente la amigdalina, precursor del cianuro.

Qué puede pasar si se consume cianuro

El cianuro es un veneno potente. La Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades (ATSDR, por sus siglas en inglés), de Estados Unidos, señala:

“Usualmente se encuentra asociado con otras sustancias como parte de un compuesto”. El cianuro de hidrógeno, el cianuro de sodio y el cianuro de potasio son algunos ejemplos.

La semilla de la ciruela no es para comer. Foto: cortesía.

La sustancia se encuentra en las almendras, brotes de mijos, algunos tipos de frijoles, soya, espinaca, vástagos de bambú y raíces de mandioca (yuca), detalla el portal.

Sobre las consecuencias de este compuesto en la salud, la ATSDR indica que “la exposición a niveles altos de cianuro daña el cerebro y el corazón y puede producir coma y la muerte. La exposición a niveles más bajos puede provocar dificultad para respirar, dolor de pecho, vómitos, alteraciones en la sangre, dolor de cabeza y dilatación de la glándula tiroides”.

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