El rey Carlos III, además de heredar el trono ocupado por casi 70 años por la reina Isabel, también heredó su legado millonario, que incluye su fortuna personal y la de la corona británica.
El primogénito de la reina Isabel recibió una fortuna de más de 360 millones de libras, o 449 millones de dólares, según el diario The Times. El rey Carlos III, quien será coronado este sábado 6 de mayo, suma esa cantidad a su propio patrimonio, que asciende a alrededor de 600 millones de libras, alrededor de 748 millones de dólares.
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De acuerdo a un informe de Forbes, Carlos ahora supervisa 46.000 millones de dólares en activos. Eso incluye propiedades reales, piezas de arte, joyas, palacios, territorios e inversiones. Además, Carlos no paga el impuesto a la herencia debido a un reglamento de 1993 que exime a los soberanos de pagar el impuesto al transferir propiedades.
Según la línea de sucesión, el siguiente heredero a la corona británica es el primogénito del rey Carlos III, el príncipe Guillermo.
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Guillermo, el Duque de Gales, heredará el trono de su padre y su patrimonio cuando Carlos III muera. De hecho, al convertirse Carlos en rey, Guillermo ya se convirtió en propietario del Ducado de Cornualles, un conglomerado valorado en 1,300 millones en activos netos.
El príncipe Guillermo, según Celebrity Net Worth, tiene una fortuna que asciende a los 93 millones de euros. Una parte de su patrimonio viene de la herencia de su madre, la princesa Diana. Mientras que otra gran parte la conforman los ingresos del Ducado de Cornualles.
A su vez, el hijo mayor de Guillermo, el príncipe Jorge de Gales, heredará algún día la fortuna de su padre. (E)