En la cálida ciudad tropical de Guayaquil diciembre se viste de blanco. La nieve cubre los locales comerciales y ventanas de algunas casas. Crecen pinos en lugar de palmeras, aparecen muñecos de nieve y renos. Papá Noel, muy abrigado, recorre centros comerciales recibiendo cartas que los niños le han escrito con ilusión. Algunos reparten caramelos, otros simplemente posan para la foto.