Al respecto, de acuerdo con la Constitución y el Código de la Democracia, la Función Electoral debe tener principios de autonomía, independencia, publicidad, transparencia, equidad, paridad de género, probidad, certeza, eficacia y eficiencia, para asegurar que las votaciones se realicen de manera libre, democrática y espontánea.
Según la gestión de la Función Electoral, el candidato ganador llegará al poder para gobernar con la mayoría de los votantes que confiaron en él y en sus propuestas, y que respaldarán sus decisiones y plan de gobierno democrático, y no habrá reparto político que perjudique al país y empobrezca a la ciudadanía. Reflexión: ¿quién es el que elige al ganador, el que cuenta los votos o los votantes? (O)
Ángel Calderón Mayorga, economista, Guayaquil