Una recusación contra la jueza penal de Pichincha, María Elena Lara, es la razón por la que por tercera ocasión consecutiva se difiere la audiencia de evaluación y preparatoria de juicio contra siete personas procesadas por el delito de delincuencia organizada, entre quienes están el expresidente Abdalá Bucaram Ortiz y su hijo Jacobo Bucaram Pulley.