Las elecciones presidenciales y legislativas adelantadas en Ecuador posicionaron a varias alianzas y organizaciones políticas en la Asamblea Nacional. En estos comicios, desarrollados el pasado 20 de agosto, el movimiento Revolución Ciudadana mantuvo el liderazgo, seguido del movimiento Construye y la alianza Acción Democrática Nacional como los tres más votados.

Hay factores, específicamente sobre la conformación de los bloques y la oposición que se pueda formar entre ellos, que preocupan a la ciudadanía.

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“En lo que se refiere al bloque de la RC no hubo novedad, porque sabíamos que íbamos a tener si no el mismo número, un número superior de asambleístas”, dijo Ximena Ron, asesora parlamentaria y electoral, en una entrevista con el programa El Mono López, transmitido por Radio City (89.3 FM en Guayaquil).

Lo que llama la atención, según Ron, es la reducción del número de asambleístas de Pachakutik y de Izquierda Democrática, que en esta ocasión no alcanzaron a inscribir a sus candidatos y no consiguieron representación en la Asamblea.

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¿A quién le corresponderá asumir la presidencia de la próxima Asamblea Nacional, que estará en funciones hasta mayo del 2025?

En el caso del movimiento Construye, al que pertenecía Fernando Villavicencio, será interesante porque “se forma un bloque de oposición fuerte y ahí vamos a ver que podría haber esta correlación de fuerzas en el interior de la Asamblea”.

Y ahí es donde la experta encuentra dos retos: que el próximo presidente de la República pueda manejar esta dinámica entre los bloques de legisladores, y que los bloques se mantengan armados y sin desgranarse.

“Una de las dificultades que tuvo Guillermo Lasso para manejar la relación Ejecutivo-Legislativo fue precisamente que no conocía y que sus primeras articulaciones que tuvo con la Asamblea fueron sin ninguna experiencia”, explicó Ron. Pero cree que ese problema no lo tendrían los candidatos presidenciales, Daniel Noboa y Luisa González, pues ambos han sido legisladores.

“Luisa y Daniel tienen esa experiencia de primera mano, esa es la primera fortaleza”, dijo la especialista.

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Para Paulo Gaibor, especialista en derecho parlamentario y excoordinador de la Unidad Técnica Legislativa de la Asamblea Nacional, es importante no cometer los errores que se cometieron anteriormente de parte de los movimientos políticos y del presidente de la República.

“Es necesario un ejercicio de autocrítica, de ampliar las bases ciudadanas, los sectores de diálogo, al no tener a una Asamblea con una mayoría consolidada”, argumentó, refiriéndose al bloque de la RC.

Quien llegue a ser presidente de la República, según Gaibor, deberá ampliarse a otros sectores y entender mejor la dinámica de lo político, respaldar un discurso con capacidad de gestión, no desplazar sus responsabilidades a la Asamblea y generar alianzas y condiciones que le sean favorables.

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El manejo de lo político, el liderazgo, la capacidad de consolidar acuerdos y alianzas sin duda va a ser fundamental para que exista una gestión exitosa del Ejecutivo en cualquiera de los dos escenarios”, señaló el experto.

Sin embargo, hay más factores que deben funcionar para que se recupere el orden democrático.

“La calidad de la representación es uno de los problemas base de nuestra democracia y hay que analizarlo con seriedad”, indicó Gaibor. Él cree que puede ser necesaria una reforma a la Ley Orgánica de la Función Legislativa, pero que el problema de Ecuador no es tanto normativo como formativo: “Es de los valores que cultivamos y la manera en la que ejercemos la política”.

Por eso, es imperativo para los ciudadanos “asumir un compromiso de corresponsabilidad y empezar a vigilar las actuaciones de los representantes que hemos escogido, que han sido electos en función de una visión de país, pero que debe ser representada en sus actos”.

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Gaibor considera que se debería apelar a un sentido de responsabilidad de los legisladores, a un sentido de compromiso ético y liderazgo que debe ser renovado.

“Hemos salido de un proceso de crisis institucional: la Asamblea Nacional, la casa de democracia, el lugar de deliberación política, fue disuelta. Ojalá no propicien otra crisis institucional en un periodo tan corto”, expresó. (I)