Leopardus garleppi, el gato de las pampas norteño, también habita en el bosque seco estacional de la Costa ecuatoriana, según científicos.

Los investigadores determinaron la presencia del felino en este ecosistema a partir de un ejemplar que fue atropellado en la reserva ecológica Arenillas, El Oro, en 2019. La zona pertenece a la ecorregión de bosque seco Tumbes-Piura.

Publicidad

El texto que detalla el descubrimiento es de autoría de Ariatna Villarreal, Teddy Ochoa y Jorge Brito, y fue publicado en la revista científica de la Asociación Ecuatoriana de Mastozoología.

Descubren cuatro nuevas especies de ranas en el norte de los Andes de Ecuador

El gato de las pampas norteño tiene una amplia distribución: vive desde los Andes del sur de Colombia hasta el norte de Chile y Argentina. Sus hábitats son variados, pues vive en punas (un tipo de ecosistema andino), páramos y bosques secos, entre otros, desde el nivel del mar a los 5.000 metros.

Publicidad

Los registros científicos de la especie en Ecuador, en contraste, habían determinado que vivía en el norte del país, en los Andes del norte, entre las provincias de Carchi y Cotopaxi, y en el sur, entre las provincias de Azuay y Loja, a elevaciones de entre 450 y 4.000 metros sobre el nivel del mar, distintas a las encontradas en otros países. El ejemplar hallado en la reserva en El Oro fue encontrado a una elevación de 25 metros.

Anteriormente ya se había demostrado la capacidad del felino de vivir en hábitats similares al bosque seco de la Costa, pues había sido registrado en el norte de Perú.

“No obstante, el bosque seco tropical es uno de los ecosistemas más amenazados del mundo. El alto impacto antropogénico que recibe el bosque seco del Litoral ecuatoriano a causa de la deforestación, las actividades ganaderas y la agricultura podría haber modificado la distribución original del felino en Ecuador”, señaló parte de la publicación.

Las tortugas gigantes de Galápagos pueden ser carroñeras: ‘Es una conducta natural, poco habitual’

A pesar de su amplia distribución, el estudio explicó que se sabe poco de la dieta de este felino. Un análisis de los contenidos del estómago del individuo atropellado reveló que tenía dos roedores y dos aves juveniles de la zona.

Los gatos de las pampas norteños suelen preferir presas pequeñas, como vizcachas, roedores tuco tucos, y algunas de porte medio, como las pacas andinas. Ocasionalmente consumen aves (como el animal estudiado), reptiles e insectos.

Sobre el motivo de muerte del felino, el estudio indicó que las vías circundantes a la reserva ecológica Arenillas no cuentan con señalización que las marque como zona de cruce de vida silvestre. Tampoco cuentan con áreas diseñadas para que los animales pasen de forma segura por la carretera.

La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) pone a la población global del gato de las pampas norteño como casi amenazada en su escala de conservación, pero el Libro Rojo de los Mamíferos del Ecuador, que evalúa la situación de los animales a nivel de Ecuador, cree que su población local está en peligro de extinción “debido principalmente a que sus poblaciones están severamente fragmentadas y a la disminución de la calidad de su hábitat”, dice la publicación.

Las tortugas gigantes de Galápagos pueden ser carroñeras: ‘Es una conducta natural, poco habitual’

A pesar de que se lo puede encontrar en distintos países de la región, la UICN señala que el gato de las pampas norteño es relativamente raro, y su población estaría disminuyendo gracias a la pérdida y degradación de su hábitat. La depredación de animales domésticos y los atropello también representan riesgos.

La UICN también señala la posibilidad de que existan varias subespecies del animal genéticamente distintas la una de la otra debido a factores como la aislación geográfica.

“Una subpoblación aparentemente separada de gatos de las pampas norteños habita la región tumbesina del oeste de Ecuador y noroeste de Perú”, explica la ficha del animal en el portal de la UICN. “El alto nivel de impacto humano en esta región ha resultado en la pérdida masiva de bosques. Ahora el felino es extremadamente raro, estando principalmente en zonas protegidas”.

La mayoría de las subpoblaciones, que podrían ser declaradas distintas especies en el futuro, serían vulnerables. (I)