Nuestro buque llamado Ecuador navega desde el 24 de mayo 2021 con comandante y dotación nueva, con cartas de navegación perfectamente definidas y con rumbos que deberán ser entendidos previamente por todos los ecuatorianos, los cuales deben estar escritos en forma clara, concreta, concisa y categórica, y que nos ha prometido arribar de forma segura al puerto del progreso y desarrollo nacional en los próximos 4 años. Esta travesía no será fácil ya que debemos enfrentar muchas tormentas, como la de la pandemia del COVID-19, inseguridad a nivel nacional, pobreza, economía en crisis, narcotráfico, salud en cuidados intensivos, narcotráfico y por sobre la más fuerte de todas las tormentas, como es la falta de unidad nacional.

El querer comandar este buque llamado Ecuador con solo dotaciones puestas por el Ejecutivo, no aseguran el arribo al puerto que nos augure mejores días a los ecuatorianos inmersos hoy en día en la pobreza y desesperanza, todos como un solo puño debemos ser parte de su dotación, esto es políticos, empresarios, trabajadores, fuerzas armadas y ciudadanía en general.

También es muy importante renovar los motores del buque, por motores de crecimiento que permitan mitigar todas aquellas variables internas y externas desfavorables al país. Si queremos que el Ecuador crezca de una manera sostenida, es necesario que estos motores estén bien calibrados de tal forma que aumenten la productividad del sector privado, lo que de hecho significa lograr que los mercados funcionen y aumenten el volumen y la calidad de la inversión nacional y extranjera.

Si realmente queremos un Ecuador mejor y preocuparnos por los mas desposeídos, debemos cambiar nuestra actitud y mentalidad de ser simples observadores de los problemas y lamentos del país a la de protagonistas del cambio, no podemos seguir pensando y dándole vueltas al pasado y al anti legado heredado del socialismo del siglo 21, porque lo único que sacaremos es desgastarnos mentalmente y perder neuronas que las podríamos usar para generar nuevas ideas creativas y diseño de proyectos de crecimiento y desarrollo

El Ecuador no necesita que los asambleístas desistan de recibir laptops y celulares, lo que necesitamos es que sigan y apoyen el rumbo dado por el comandante del buque; que trabajen con mayor patriotismo, lealtad y honor; que propongan leyes prácticas y de propiedad intelectual propias; que saquen de su mente el toma y daca; y que por alguna vez en la historia del Ecuador se unan en un solo puño para sacarnos de la pobreza.

El Estado debe hacer una reingeniería en todas sus instituciones, que busque siempre la eficiencia; preste servicios de educación, salud, seguridad ciudadana y seguridad social de calidad; se ajuste a las prioridades del país y por sobre todo que su recurso humano sea fortalecido por la alta dirección con el ejemplo en principios y valores morales tan venidos a menos hoy en día; que tengan la mentalidad de servir a su pueblo con educación y respeto; y que funcionen de forma transparente, rindiendo cuentas a la ciudadanía.

El Ecuador no aguanta más, o nos unimos para sembrar más progreso y desarrollo sustentable para sacar de la pobreza e indigencia a los ecuatorianos o naufragamos en la primera tormenta que enfrentemos. Solo unidos salvaremos al Ecuador. (O)