Este domingo la población se pronunció en amplia mayoría por el no en las cuatro preguntas promovidas por el presidente de la República, Daniel Noboa. Y pese a que varios están de acuerdo en que el resultado parece más un no hacia él en sí, también hablan del escenario que queda para el país tras el no en cada tema de las preguntas.

El no a disminuir la cantidad de legisladores de 151 a 73

Simón Pachano (politólogo):

¿Qué representa esto? A mí me parece una buena noticia, porque nos permite repensar el tema de la proporcionalidad de la representación legislativa con respecto a la población del país y, por lo tanto, esto es más bien un buen momento para pensar si es que mantenemos lo que existe ahora, que es un número determinado por la población y que se va incrementando de acuerdo precisamente al crecimiento de esta, o se mantiene estático un número como el que se ha planteado, se planteaba en la consulta y que no ha sido aprobado.

Pero me parece que es un buen momento para reflexionar sobre el tamaño que debe tener el órgano legislativo con respecto a la población ecuatoriana. (O)

Gustavo Cortez Galecio (analista y periodista):

Coincido en que es sorpresivo, porque el discurso sonaba muy muy positivo en el sentido de reducir asambleístas en un país donde mucha gente cree que los asambleístas no han estado haciendo nada, o han estado ganando por sus intereses, o que eran demasiados para lo que se necesitaba y para lograr mayorías que viabilicen la gobernabilidad en el país.

Entonces, con ese discurso de fondo parecía lo más probable que gane. Sí, pero estamos viendo resultados y hemos detectado que ha ganado la opción no, lo que significa que los partidos de oposición que hicieron campaña muy intensa por la opción no, sobre todo las últimas semanas de la campaña, la última semana, porque fue una campaña muy corta, han logrado calar con el mensaje de que la representatividad tiene que respetarse, tiene que cuidarse, y que además cada asambleísta tiene en su entorno toda una estructura que a nivel de provincias es también una estructura importante en lo que tiene que ver con la burocracia que los partidos necesitan tener en poderes como el Legislativo. Esperemos que esta ratificación del número de asambleístas, que es la misma que había hasta ahora, 151, haga que el Legislativo tome esto como un reto, como una nueva disposición del votante para lograr más eficiencia y demostrar que ese número de asambleístas siempre fue el necesario y que, por eso, la población les ha dado un respaldo con el voto no. (O)