¿Sabían Ustedes que el Ecuador tiene más kilómetros cuadrados de territorio que el Reino Unido? Es decir que sumando las superficies de Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte, y Gales, no llegan al tamaño de nuestro país. Es curioso escuchar en tantos contextos decir que Ecuador es un país chico, y no haber escuchado aun lo mismo de Inglaterra. Me incomoda la facilidad y el simplismo de varios periodistas deportivos que finalizan sus argumentos diciendo que lo que pasa es que nuestro país es un país chico. Lo mismo pasa en el periodismo financiero y político, donde con frecuencia usan este paupérrimo argumento para sentenciar nuestro destino. El problema es que cuando se lo escucha en televisión, en radio, y en redes, de forma sostenida y por tanto tiempo, se vuelve una opinión popular que se repite en la mesa de un comedor, o en la calle, como si fuese verdad. Y no lo es. No tengo duda alguna que mientras más nos lo repetimos, más chico nos volvemos.

Nos han hecho creer que merecemos poco. Si sumamos los tamaños de Países Bajos, Bélgica, Dinamarca, Suiza, no llegan al tamaño de Ecuador. Sin embargo nos superan con creces en educación, en salud, en lo económico, en lo político, y en la mayoría de veces en lo deportivo. Ellos decidieron su grandeza hace mucho tiempo atrás. Pueden preguntarle a cualquiera de las empresas más grandes exportadoras de banano o de camarón del Ecuador, si somos chicos, y escuchemos sus respuestas. Dudo que se sientan pequeños. No hay ningún motivo por el cual nuestro país en la actualidad no pueda decidir ser el mejor del mundo en el ámbito que lo decrete, de forma privada o pública. Como nunca antes la información está a un clic de distancia. ¿Qué nos aleja de estudiar a fondo los mejores modelos de educación y replicarlos? Hace poco leí noticias de como los japoneses están reformando su sistema educativo pensando en el futuro, pensando en grande. Un país que no es de los más grandes en territorio, tiene objetivos inmensos para su pueblo. ¿Qué nos aleja de convertirnos en una potencia deportiva? ¿Qué nos aleja de tener un sistema de salud pulcro, honesto, servicial, eficiente, que sea un modelo para otros?

El tamaño del territorio es lo de menos, en ese ámbito somos medianos en el contexto mundial, lo que más importa es lo que llevamos en los pensamientos. Chicos son los sueños, pequeñas son las visiones, ínfimos son los objetivos. Lamentablemente nuestro país lleva mucho tiempo siendo administrado por personas de visiones cortas, y codicias grandes, que poco les ha importado el país. Nos han visto como su proyecto político personal. Desde lo privado podemos hacer mucho, como lo han logrado ya empresas, personas, deportistas, artistas. La única receta es soñar en grande y luchar por ello con planificación, disciplina, y un deseo ardiente imparable.

Desde lo púbico se puede hacer todo: modernizar la educación pública, invertir en infraestructura vinculada a la producción, erradicar la delincuencia de las calles, tener un sistema de salud modelo que de ejemplo de excelencia. Ser grandes es un reto para mentes grandes. (O)