El padre y la madrastra de un niño de siete años que fue víctima de tortura en Naranjal cumplirán una pena privativa de libertad de 17 años y 4 meses. Así lo determinó el Tribunal de Garantías Penales de Durán, con base en las pruebas presentadas por Fiscalía en contra de Maicon V. M., padre del niño, y Mariana Q. H., madrastra.
El caso se conoció el 6 de septiembre de 2021, cuando la Unidad Nacional de Investigación y Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (Unipen) notificó a Fiscalía el ingreso —cuatro días antes— de un niño en estado grave al hospital Francisco de Icaza Bustamante, con signos de violación, maltrato físico y tortura.
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Durante las primeras diligencias se constató que el niño presentaba dos cuadros: el primero eran signos de maltrato físico; y en segundo lugar, la presunción de vulneración de integridad sexual, ambos enmarcados como delitos no flagrantes.
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La víctima vivía con los sentenciados y cinco hermanastros. Luego del desarrollo de acciones interinstitucionales, el niño pasó a un hogar de acogida con el fin de precautelar su desarrollo físico y emocional.
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Apenas se conoció el caso, en septiembre del 2021, la mujer y el padre de los menores fueron detenidos, pero horas después se los liberó por orden judicial, pues la fiscal del cantón no habría solicitado la prisión preventiva.
En enero de 2022, finalmente, ambos fueron detenidos para, posteriormente, ser procesados.
Según informó la Fiscalía a través de un comunicado del pasado 9 de diciembre, el fiscal Yoli Pinillo presentó ante el tribunal los testimonios de los peritos que realizaron los informes de valoración médica, psicológica y de entorno social al infante.
En esos informes constaban los detalles de las agresiones físicas y sexuales de los que fue víctima por parte de su madrastra.
La Fiscalía indicó que a estos informes se sumó el testimonio del médico legista, el informe de historia clínica de las casas de salud donde fue atendido, testimonios de médicos y allegados del entorno familiar, entre otros.
Por estos hechos, Mariana Q. H. también fue sentenciada a 29 años y 4 meses de prisión por el delito de violación perpetrado contra el mismo niño.
En enero de este año, durante el desarrollo del caso, el pleno del Consejo de la Judicatura resolvió la destitución de los fiscales que llevaron adelante las primeras investigaciones por la tortura de dos menores de edad en el cantón Naranjal, en Guayas. La decisión se tomó luego de que se analizara que existió manifiesta negligencia en el caso. (I)