Isaysi Manuela Daquilema encontró en sus raíces la fuerza para la lucha social

Isaysi Daquilema Lasso se sabe una mujer fuerte. Por eso, hace cinco años, dejó de llamarse María y se cambió a Isaysi, que significa mujer fuente de seguridad. Tomó esa decisión porque le molestaba el racismo con el que muchas personas se refieren a las mujeres indígenas como “las Marías”.

Noticias relacionadas

Nueva denuncia contra siete candidatos a CPCCS, que tendrían afinidad al correísmo, llega al TCE pidiendo su descalificación

Candidatos al CPCCS, que son promovidos por Revolución Ciudadana, presentaron sus propuestas en Guayaquil

hace un año

Su nuevo nombre también hace honor a su lugar de nacimiento, Isay, un sector de San José de Tipín, en Palmira, cantón Guamote (Chimborazo). “Nací en un lugar de pastoreo donde a mi mamá le cogieron los dolores”, cuenta.

Sucedió hace 40 años. Viene de una familia de líderes comunitarios, quienes le hablaron de sus antepasados, como Fernando Daquilema y Ambrosio Lasso, que lucharon contra la explotación indígena.

Ella lleva presentes las palabras de su abuela materna, que deseaba ver a sus descendientes como líderes. Recuerda que les decía; “La educación es la mejor arma para que defendamos los derechos”.

Daquilema estudió en la escuela de su comunidad, donde se hablaba principalmente quichua. Fue al colegio de Guamote, donde perfeccionó el español. Siguió una ingeniería en Marketing, en la Escuela Superior Politécnica de Chimborazo. Su idea era usar esas herramientas para impulsar sus ideas políticas o crear un emprendimiento comunitario.

Fue promotora de la Junta Parroquial de Palmira en 2011. Luego fue miembro de una veeduría del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) que revisó un concurso para funcionarios de la Cancillería. Fue asistente administrativa del asambleísta Gerónimo Yantalema (Pachakutik), entre 2012 y 2013.

Después trabajó como asistente administrativa de la Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador (Ecuarunari), por cinco años, cuando estaba presidida por Yaku Pérez Guartambel.

Ahí encontró la oportunidad para seguir una maestría en la Universidad de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe Nicaragüense, por un convenio con la Pluriversidad Amawta Wasi, de Ecuador. Estudió Comunicación Intercultural.

Fue capacitadora del Consejo Nacional Electoral en las elecciones seccionales de 2019. Cuando Yaku Pérez fue elegido prefecto de Azuay, pasó a trabajar con él y llegó a ser responsable de la agenda del gobierno provincial.

Dejó ese cargo en 2020, cuando Pérez renunció para candidatizarse a la Presidencia de la República. Entonces, Daquilema presentó una declaración jurada donde registró un patrimonio de $ 4.400.

En 2022 trabajó en la Fundación Camino del Agua.

Ha pagado $ 1.340 de impuesto a la renta en cinco años, aunque no presentó las declaraciones de 2015, 2017 y 2018, según el SRI. Afirma que es una equivocación, pues el mismo SRI le certificó que no tiene ninguna obligación pendiente.

Tiene en mente despolitizar el CPCCS; hacer control para garantizar que los grupos vulnerables tengan acceso a la educación, el trabajo y la salud; y prevenir la corrupción.

Promueve el no en la próxima la Consulta Popular, pues considera que el Gobierno quiere quitar a los ciudadanos el poder de designar autoridades de control para devolverlo a los políticos. (I)