El ministro de Gobierno, Henry Cucalón, negó que el régimen de Guillermo Lasso haya “negociado” el salvoconducto de María de los Ángeles Duarte, exsecretaria de Estado del correato, a cambio de apoyo político del expresidente Rafael Correa, tal como este lo afirmó en una entrevista con el medio colombiano El Tiempo.

Duarte se fugó de la Embajada de Argentina en Quito, donde se hallaba asilada junto con su hijo menor de edad. Ella está sentenciada a ocho años de cárcel por cohecho dentro del caso Sobornos.

“Rompiendo el derecho internacional y la Convención de Caracas de 1954, Lasso se ha negado a darle el salvoconducto, que tiene obligación de darlo, y la ha utilizado como rehén. A nosotros nos ha mandado mensajes: si me apoyan en esto, podríamos dejarla libre, y lo que hizo María fue dejar la embajada”, indicó Correa en la citada publicación.

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El expresidente indicó que sabe muy bien cómo ocurrieron los hechos respecto al escape de Duarte, al que consideró totalmente justificado.

En un comunicado, Cucalón dijo: “Una vez más miente el expresidente Correa, prófugo de la justicia por el caso Sobornos, por el cual él se encuentra fugado”.

“Las amenazas e insultos que Correa ha lanzado en los últimos días lo dejan en evidencia: él conocía a detalle que existía un plan para que una persona sentenciada por cohecho se escape de la justicia ecuatoriana, utilizando vilmente a la embajada de una república hermana”, indicó.

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Agregó: “Que Correa acepte que conocía los detalles de la fuga es un delito, sus afirmaciones lo hacen cómplice, lo cual no nos debe sorprender viniendo de un aspirante a autócrata acostumbrado a burlar la ley”.

“El derecho internacional, a través de diversos instrumentos, considera que son sujetos de asilo político las personas que son víctimas de persecución de un Estado por razones ideológicas. El caso de la señora Duarte es el de una persona sentenciada por corrupción, por lo que el Estado ecuatoriano jamás la consideró merecedora de asilo político y, por lo tanto, negó en reiteradas ocasiones el salvoconducto para salir del país solicitado por la procesada. Es descabellado insinuar que se pretendía negociar políticamente sobre un asunto que fue tajantemente rechazado por el Gobierno del Ecuador en diversas ocasiones”, expresó el funcionario.