El Centro de Estudios Ambientales y Químicos de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (Cesaq-PUCE) ha realizado durante varios años estudios sobre la presencia de metales pesados como el plomo, el mercurio, el cadmio, el cromo y el níquel -que son muy tóxicos- en alimentos que se comercializan en el país. Los resultados han sido alarmantes, pues esos químicos están relacionados con la generación de cáncer y otras enfermedades catastróficas.