En el suroriente de la ciudad, en la parroquia de Píntag, la Asociación de Transporte Pesado en Volquetas y Maquinaria de Quito (Atrovolq) cerró la vía al Antisana, a la altura del peaje de San Alfonso. Los transportistas reclamaron la falta de atención de las autoridades en este sector.

La paralización se llevó a cabo esta mañana, en el lugar los ciudadanos protestaron por la mala condición de las calles. Según indicaron, la vía está abandonada desde hace 14 años y existen ofrecimientos de mejoras desde la anterior administración del Consejo Provincial.

Según Gabriel Noroña, presidente del GAD de Píntag, “es una vía sumamente deteriorada” pues fue construida hace aproximadamente 30 años utilizando una técnica de asfaltado en frío, que “no es de buena calidad y no se tenía miras de que en el sector exista transporte de material pétreo o una explotación minera”, añadió.

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La vía al Antisana consta de unos 5 kilómetros y en ella existe un control pétreo, donde se cobra el paso únicamente a los vehículos pesados que realizan labores de minería en la zona. De acuerdo con cifras del Gobierno parroquial, se recaudan USD 400 diarios que son utilizados para dar mantenimiento a las vías de los 40 barrios.

Los trabajos de rebacheo se realizan cada tres meses en todas las calles que lo necesitan. En el caso de este camino en particular, el costo asciende a 10.000 dólares en cada ocasión. Estas actividades continúan pues las competencias del GAD no contemplan la construcción de una nueva vía o, en este caso, una repavimentación completa.

“Esa vía es del Consejo Provincial de Pichincha, está catastrada como vía principal”, aseguró Noroña. También hizo un llamado a las autoridades de control municipal porque aduce que las volquetas cargan en exceso y fuera de los horarios permitidos y eso afecta al asfaltado del lugar.

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Como parte de la protesta de hoy, los manifestantes plantearon un ultimátum a las autoridades para recibir una respuesta en los próximos quince días. Caso contrario amenazaron con cortar el suministro de agua de la ciudad. “Eso sería vandalismo y el gobierno parroquial no respaldará esas acciones”, enfatizó Gabriel Noroña.

Una mesa de trabajo con la participación del GAD de Píntag y el Consejo Provincial de Pichincha se llevará a cabo en los próximos días para tomar medidas en favor de la comunidad, explicó Noroña. (I)