Desde este martes, la Asamblea retomará el primer debate de la Ley de Crecimiento Económico. Uno de los pilares de la ley tiene que ver con las reformas al Código Monetario, y dentro de ellas, una nueva estructura del Banco Central del Ecuador (BCE). La idea es garantizar su independencia del Ejecutivo.

La gerenta del Central, Verónica Artola, ha indicado que su directorio estará conformado por cinco miembros nombrados por el presidente de la República. De estos, tres son a tiempo parcial y dos a tiempo completo. También se busca recapitalizar al Banco. Es que el BCE tiene inversiones en el Ministerio de Economía y Finanzas y la banca pública que, según la ley, serán honradas por esas entidades. Se crea un cronograma de pagos hasta el 2026 para que el BCE nuevamente tenga una cobertura importante de los activos líquidos dentro de su balance. Explica Artola que la Constitución dice que el BCE instrumenta las políticas del Ejecutivo.

Las reformas han generado una duda en la Asamblea sobre la verdadera autonomía de los organismos que son nombrados, según el proyecto, por el propio presidente, y un debate en lo interno de las autoridades, pues desde la Superintendencia de Bancos se considera que no se han tomado en cuenta temas clave, propuestos por esa entidad.