La Contraloría General del Estado envió una notificación el pasado 19 de diciembre al expresidente de la República Rafael Correa, sobre el inicio de un examen especial al proceso de otorgamiento de asilo diplomático al australiano Julian Assange, quien permanece en la embajada de Ecuador en Londres, desde agosto del 2012.

Según la notificación, que fue publicada ayer por Correa en su cuenta de Twitter, el examen comprende el periodo entre el 1 de enero de 2012 y el 30 de septiembre de 2018, e incluye examinar el proceso de naturalización de Assange como ciudadano ecuatoriano, gestionado durante el gobierno de Lenín Moreno, a cargo de la excanciller María Fernanda Espinosa.

La investigación está a cargo de la Dirección Nacional de Auditoría de Administración Central, y entre los objetivos generales está determinar si los procesos y actuaciones administrativas para el asilo y la naturalización “se efectuaron de conformidad al Derecho Nacional e Internacional...”.

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Correa, quien reside en Bélgica, Europa, cuestionó el examen especial y con sarcasmo tuiteó que la investigación “es tan ‘procedente’ como hacer un examen especial al nombramiento de un ministro”.

El exmandatario responsabilizó al contralor subrogante Pablo Celi de una persecución. “Ya que gobierne nomás Celi, el contralor impostor. Por su odio y persecución, somos el hazmerreír del mundo”, dijo Correa.

Se conoció que la Contraloría inició otro examen especial a la gestión administrativa y financiera relacionada a los costos incurridos por el Ecuador, para mantener a Julián Assange en la Embajada del Ecuador en el Reino Unido. Correa también habría sido notificado. (I)