En medio del estallido del caso Odebrecht en Ecuador en los últimos días, el vicepresidente de la República, Jorge Glas Espinel, sale a defenderse. Lo hace a través de los medios, en entrevistas, y porque su tío está involucrado. No es la primera vez, pues en la última década se han dado otras denuncias de supuestos actos de corrupción en los cuales lo han mencionado o se han tomado su nombre.