La presidenta del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, Carmen Lucia, convalidó ayer las 77 delaciones de exejecutivos de la constructora Odebrecht sobre la red de sobornos de Petrobras (caso Lava Jato), una señal de que el caso avanza tras la muerte del juez Teori Zavascki, que llevaba el proceso.

En la práctica, la medida incorpora al expediente todos los testimonios que detallan el pago de sobornos de empresarios a funcionarios y operadores políticos de primer plano para obtener contratos y beneficios.

Las confesiones se mantienen por el momento, pero las primeras filtraciones de las confesiones involucraron al presidente Michel Temer y a varios de sus allegados, que desmienten terminantemente cualquier implicación.

Publicidad

El STF instruye los procesos contra funcionarios federales con cargos vigentes y, por lo tanto, protegidos por fueros especiales, como diputados, senadores y ministros.

La convalidación se produjo el mismo día de la detención del empresario Eike Batista, otrora el hombre más rico de Brasil, por sospechas de haber montado una red de corrupción junto con el exgobernador de Río de Janeiro Sergio Cabral, detenido desde noviembre, en el marco de una ramificación de la investigación Lava Jato. (I)