A lo largo del mundo, varios países han adoptado acciones ante la pandemia de coronavirus dentro del hogar que en otras regiones pueden llegar a sorprender. Uno de estos es entrar al hogar sin zapatos.

En Japón, Canadá, Turquía, China y varios países nórdicos, esto es casi obligatorio y el no hacerlo constituye una falta de respeto. A raíz de la pandemia de COVID-19, en el 2020, en el lado occidental varios hogares comenzaron a ajustar sus rutinas de manera de tomar esta medida como prevención ante el desconocimiento del comportamiento del virus.

En países europeos, como Suecia o Finlandia, donde llueve mucho y la nieve es algo habitual, dejar los zapatos en el umbral antes de entrar a casa es un tema práctico que, además de evitar la contaminación, ayuda a conservar el piso limpio, sobre todo si este es de madera.

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Bacterias

Si bien aún no hay evidencia de la transmisión por objetos del SARS-CoV-2, no es una mala medida para mantener.

Los zapatos son la prenda que está en contacto con el suelo por lo que puede ser receptor de varias bacterias, además de transportar la suciedad del exterior.

Un estudio de la Universidad de Arizona detalló que en un periodo de dos semanas, los zapatos fueron capaces de recolectar 420 mil bacterias, al menos el 27% era Escherichia coli por el contacto con heces en la vía pública. También se ha encontrado presencia de microorganismos responsables de afecciones como neumonía y conjuntivitis.

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Las bacterias de los zapatos, ¿hay que quitárselos para entrar a casa?

Ante esto se sugiere tener un espacio donde poner los zapatos a la entrada del hogar o a su vez limpiarlos constantemente, si bien las posibilidades de contagio son pocas, esta acción le ayudará a mantener una casa limpia.

Mejor postura

En los beneficios para el cuerpo, caminar descalzo es saludable para la espalda, ya que corrige el desequilibrio de los movimientos, ayuda a fortalecer los músculos, los huesos de los pies y los tobillos.

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(I)