Es común pensar en la inteligencia como algo con lo que simplemente se nace. Sin embargo, la inteligencia no es un rasgo establecido. Es una habilidad cambiante y flexible para aprender y estimular su cerebro que puede mejorar con el tiempo.

La clave es practicar actividades que apoyen y protejan su cerebro.

Seguir ciertos pasatiempos puede ayudar a mejorar su inteligencia general, que incluye dos tipos:

Publicidad

  • Inteligencia cristalizada. Esto se refiere a su vocabulario, conocimientos y habilidades. La inteligencia cristalizada generalmente aumenta a medida que envejece.
  • Inteligencia fluida. También conocida como razonamiento fluido, la inteligencia fluida es su capacidad para razonar y pensar de manera abstracta.

A continuación, te presentamos una serie de pasatiempos que benefician a tu mente:

Tocar un instrumento musical

Imagen de una persona tocando una guitarra.

Investigaciones sugieren que tocar regularmente un instrumento musical influye positivamente al cerebro y puede mejorar las habilidades cognitivas.

Diversos investigadores han demostrado que tanto escuchar música como tocar un instrumento musical aumenta la capacidad de la memoria. Tocar un instrumento musical también te enseña paciencia y perseverancia, ya que se necesita tiempo y esfuerzo para aprender a tocar un instrumento musical. También agudiza tu concentración.

Publicidad

Leer

Imagen de un niño leyendo las páginas de un libro. Foto: Unsplash

La investigación muestra que la lectura también puede ayudar a aumentar su inteligencia. Según una estudio de 2015 , la lectura estimula cada parte de tu cerebro, junto con las conexiones neuronales entre ellas.

Esto se debe a que requiere múltiples funciones cognitivas, que incluyen:

Publicidad

  • atención
  • memoria de trabajo
  • memoria de almacenamiento a largo plazo
  • razonamiento abstracto
  • comprensión
  • procesamiento visual de letras

Además, un estudio de 2013 también determinó que la lectura mejora la conectividad entre las regiones del cerebro involucradas con la comprensión. Este efecto puede durar un par de días después de la lectura, lo que sugiere beneficios a largo plazo.

Hacer ejercicio

Mantenerse físicamente activo es una de las mejores maneras de mejorar el funcionamiento del cerebro.

De acuerdo a un estudio de 2018, el ejercicio ligero promueve la actividad en el hipocampo, que está involucrado en la memoria. También mejora la conexión entre el hipocampo y otras regiones del cerebro que regulan la memoria.

También, una investigación de 2014 encontró que el ejercicio aumenta el volumen del hipocampo. Los autores del estudio especularon que la actividad aeróbica promueve el crecimiento de las neuronas, lo que aumenta la estructura y función del cerebro.

Publicidad

Para disfrutar de los beneficios cognitivos del ejercicio , es importante hacerlo con regularidad. La buena noticia es que no tiene que hacer ejercicio vigoroso para obtener los beneficios, como trotar, hacer yoga o senderismo.

Jugar videojuegos

Imagen de un Game Boy junto a un cartucho de Tetris.

Se ha demostrado que jugar videojuegos tiene varios efectos positivos en el cerebro. Investigadores en Alemania descubrieron que jugar 30 minutos diarios de Super Mario durante dos meses resultó en un aumento en las regiones del cerebro responsables de la orientación espacial, la formación de la memoria y la planificación estratégica.

En otro estudio, las personas que jugaron juegos de acción vieron una mayor capacidad para rastrear varios objetos al mismo tiempo y prestar atención a los eventos que se mueven rápidamente.

Meditar

La meditación es una herramienta útil cuando buscamos bienestar. Imagen: Pexels

Otra forma de volverse más inteligente es practicar la meditación.

En un estudio de 2010, la meditación se asoció con un mejor funcionamiento ejecutivo y memoria de trabajo. Estos efectos se observaron después de solo cuatro días de meditación.

Un estudio de 2019 encontró resultados similares. Después de que los participantes completaron 8 semanas de sesiones de meditación guiada de 13 minutos, su atención, capacidad de reconocimiento y memoria de trabajo aumentaron. La ansiedad y el estado de ánimo de los participantes también mejoraron.

Los investigadores especularon que estos efectos cognitivos se debían a los beneficios emocionales de la meditación. (I)