En un hecho histórico y sin precedentes, un hombre turco acordó pagar 10.000 liras turcas (unos 238 dólares) trimestrales a su exesposa para el cuidado de sus dos gatos tras su divorcio.
La exesposa obtuvo además la custodia completa de los animales y una compensación personal adicional de 550 liras (13 dólares), según detalla PA Turkey.
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El acuerdo, que se mantendrá durante diez años o hasta el fallecimiento de los gatos —lo que ocurra primero— y se ajustará según la inflación, ha generado gran interés público.
Expertos legales señalan que, de confirmarse por los tribunales, este podría ser el primer caso en el país donde la manutención de mascotas se reconoce formalmente como parte de un acuerdo de divorcio.
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Defensores de los derechos animales consideran que representa “un paso hacia el reconocimiento de las mascotas como miembros de la familia y no como propiedad”, dado que actualmente la legislación civil turca las considera posesiones legales.
El caso también refleja la creciente presión sobre los tribunales turcos ante disputas por la custodia de mascotas en ciudades como Estambul, Ankara e Izmir, y podría marcar un cambio cultural y legal en la forma en que la sociedad percibe a los animales de compañía. (I)