Bajar de peso caminando es algo que algo que usualmente recomiendan los expertos desde tiempos inmemorables, y ciertamente están en lo cierto, porque es un hecho que funciona.
Cuando una persona agrega a su rutina los paseos regulares, también está sumando beneficios a su vida, como, por ejemplo, incrementa el movimiento diario, toma aire fresco y recibe luz del sol, lo que, además de ayudar a su salud física, aporta a su salud mental.
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Según Women’s Health, mensualmente hay un promedio de 2.400 búsquedas en Google sobre “consejos para perder peso caminando”, lo que deja claro que todo lo que gira en torno a este tema sigue generando dudas y que buscar ayuda de expertos es necesario para lograr mejores resultados.
La fisioterapeuta Sam McGowan da seis consejos para que la rutina de caminar sea efectiva para perder peso en un lapso de al menos cuatro semanas.
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“Cuando se trata de caminar para adelgazar, el movimiento en general es estupendo: todo tiene que ver con el equilibrio energético”, explica McGowan. En otras palabras, tienes que gastar más energía (calorías) de la que ingieres. Es lo que se conoce como déficit calórico, afirma McGowan.
Hacer las cosas bien es una premisa que sigue siendo prioridad, incluso para caminar, pues aunque se trate de un ejercicio de bajo impacto, los riesgos de lesiones son algo que hay que eliminar del panorama de posibilidades.
Lo primero que cuidarse es la postura, la persona debe caminar erguida levantando el torso hacia arriba y fuera de las caderas para evitar el encorvamiento. Esto servirá para respirar mejor y ejercitar los músculos centrales, las piernas y glúteos, recomienda David Wiener, especialista en entrenamiento de la aplicación de fitness Freeletics.
En segundo lugar se debe mirar hacia arriba, nada de ver el suelo mientras estás caminando para perder peso; así se logra equilibrar la cabeza sobre el cuello y con la columna vertebral.
De tercero, se debe estar erguido en todo momento para que pueda aterrizar con los pies justamente debajo del cuerpo y así caminar mejor, al tiempo que se previenen las lesiones.
Como cuarto punto, es necesario usar los brazos, esto significa que los codos estén doblados a 90 grados, mientras que las manos y muñecas deben estar relajadas, pero sin aflojarlas mucho. Un plus es que los brazos estén moviéndose ligeramente hacia adelante y hacia atrás para quemar de 5% a 10% más calorías.
La quinta recomendación es practicar y tomar el tiempo para conocer cómo funciona el cuerpo. Caminar más despacio de lo usual para saber cómo es la pisada; la posición de la cabeza y la tensión de los brazos y así ir avanzando en la meta de adelgazar caminando.
De último, se puede golpear el suelo primero con el talón e ir desplazándose desde ahí hasta la punta del pie. Lo que servirá para evitar lesiones.
(I)
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