La inflamación puede presentarse como consecuencia de diversas dolencias o enfermedades, por lo que es común recurrir a antiinflamatorios que puedan ayudar a lidiar con las dolencias. Cada vez son más las personas que buscan distintas opciones a los médicamente tradicionales, para tratar ese tipo de padecimientos.

A continuación, contaremos algunas de las alternativas naturales para ayudar con el proceso de recuperación, y que te sientas mejor en el menor tiempo posible, según el Médico especialista Carlos Fabián Ávila.

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Jengibre

De familias “cercanas” a la cúrcuma y el cardamomo, esta raíz es popular en la medicina tradicional china desde tiempos inmemoriales. Se dice que reduce el dolor articular y tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas.

Un ensayo clínico publicado en Osteoarthritis and Cartilage comenta que el jengibre resultó ser más potente que el ibuprofeno para aliviar dolores musculares crónicos. Por tanto, no dudes en aprovechar sus bondades con un rico y picante té. También, puedes consumirlo en polvo o crudo para potenciar el sabor y la jugosidad de todo tipo de recetas.

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Romero

La infusión de esta planta favorece el cutis.

El romero es una rica hierba aromática que le aporta sabor a las comidas. Como lo plantea un artículo de Flushing Hospital Medical Center, sus compuestos antiinflamatorios podrían ayudar a estimular el sistema inmunitario y mejorar la circulación sanguínea. Para que puedas disfrutar de sus propiedades, lo mejor es consumirla en forma de infusión.

Cúrcuma

Una de las maneras más populares de consumir la cúrcuma es en té.

Esta especia de origen indio es uno de los mejores antiinflamatorios naturales. Así lo indica una revisión publicada en la Revista Foods sobre los efectos en la salud de uno de los componentes principales de la cúrcuma: la curcumina, la sustancia responsable de su color naranja característico.

Cola de caballo

Cola de caballo

La cola de caballo es una hierba muy popular ya que se le atribuyen ciertas propiedades para ayudar a reducir la acumulación de líquidos y perder peso. También, se dice que tiene efectos cicatrizantes y antiinflamatorias. No obstante, debes consumirla con precaución, ya que su consumo en exceso puede ocasionar efectos secundarios.

Piña

La piña es una fruta que se caracteriza por mejorar las funciones digestivas. Imagen: Pexels

La piña es una fruta con propiedades antiinflamatorias. Esto, según una publicación de Biotechnology Research International, se debe a una enzima llamada bromelina. Por lo tanto, vale la pena comer unas rodajas de la fruta cada semana, o también usarla en jugos, ensaladas o batidos. También, puedes encontrar la bromelina en forma de suplemento.

Laurel

La hoja de laurel tiene propiedades astringentes, diuréticas y estimulantes del apetito.

Las hojas de laurel que tanto usas en tus preparaciones culinarias pueden servirte para reducir los dolores causados por el reuma. Además, es un remedio que todos tenemos a mano. Esta planta se utiliza en la cultura popular como uno de los mejores antiinflamatorios naturales para tratar torceduras de tobillos, dolor de ciática y reducir todo tipo de inflamaciones. Para un té, basta con hervir agua y agregar una hoja de laurel. Tras un hervor de 3 minutos, se deja reposar antes de tomar. (F)