Entre las causas que provocan la falta de apetito sexual, están las fisiológicas como el síndrome de déficit de testosterona. La disminución de esta hormona puede afectar a la libido y la percepción del deseo, tal y como explica Silvia C. Carpallo, escritora y sexóloga, a Harper Bazaar.

Sin embargo, en la mayoría de casos los motivos van más allá de lo físico. A veces está relacionado con el cansancio físico, la falta de tiempo, el estrés, la ansiedad y la falta de conexión en la pareja.

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Para superar estos desafíos, los expertos recomiendan tareas que no tiene que ver con el sexo. Como ponerse en el lugar del otro, compartir actividades de ocio, mejorar la comunicación o limar las asperezas.

Según la especialista, la a sexualidad está ligada a otras áreas de la vida. Por eso, si en el sexo tiene problemas, se puede afectar el humor, la autoestima o la alimentación.

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(I)

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