El déficit de magnesio es un trastorno electrolítico que afecta, a veces de manera imperceptible, a importantes órganos y tejidos del cuerpo humano. Además, repercute de forma negativa en el redimiento físico.
El cuerpo nos alerta con unos síntomas muy leves que puede que no asociemos a este mineral. Sin embargo, esos síntomas tan imperceptibles nos pueden alertar de que el organismo nos está pidiendo algo.
Publicidad
Los síntomas más comunes son las dolencias musculares, es decir, sensaciones de hormigueos, entumecimientos, calambres o tensiones en algunos tejidos musculares del cuerpo, pueden deberse a un déficit del mineral, en especial si el afectado es atleta y, por su actividad, requiere una mayor concentración del nutriente.
La otra es el cansancio y la debilidad, la fatiga recurrente y la sensación de estar imposibilitado para diversas actividades, o incluso para cualquiera, también son síntomas frecuentes de un funcionamiento poco adecuado del organismo.
Publicidad
Otras causas se que se peresentan en menor medidada son:
- Problemas de sueño. La falta de magnesio puede conseguir a la hora de dormir (bajan los niveles de este mineral) falta de sueño e hiperactividad.
- Estreñimiento. El magnesio es un laxante natural por ello, su déficit, contrae el intestino provocando estreñimiento.
- Calambres en las piernas.
El sitio especializdado Medline Plus establece ciertas causas por las que hay un baja en el magnesio. Entre estas se encuentra: el consumo de alcohol, orina excesiva, hiperaldosteronismo, trastornos tubulares renales, desnutrición, sudoración excevisa, entre otras. (I)