El éxito siempre se aprende de los mejores, el triunfo de Guillermo Lasso nos invita a generar algunas valiosas reflexiones sobre personas como él, capaces de inspirar y empujar a luchar a otros por sus objetivos y retos. Más allá de la línea política o de la innegable remontada histórica de votos, están las lecciones de vida.

Primero, el triunfo se gana con enfoque, bien se dice que tu enfoque determina tu realidad. Es claro que el éxito se consigue cuando los sueños son más grandes que las excusas. El enfoque determina la dirección de tu vida, y sí que se ve en Guillermo Lasso un propósito claro: servir a los ecuatorianos. Unos sueñan con el éxito, otros como Guillermo Lasso se despiertan temprano todos los días y trabajan duro para conseguirlo.

Segundo, el triunfo se consigue con persistencia, “el hombre superior es persistente en el camino cierto”, afirmó hace miles de años Confucio. La persistencia es la medida de la fe en uno mismo. Da siempre lo mejor de ti, lo que plantes hoy lo cosecharás mañana, es el fruto de la persistencia. Son doce años y tres campañas que atestiguan su persistencia.

Tercero, el triunfo se consigue con humildad para mejorar, para reconocer cuando hay que rectificar y dar ejemplo de cambiar, luego de la primera vuelta Guillermo cambió de asesores, abrieron a temas y causas, entraron en el mundo del TikTok. Guillermo se encontró con otro Guillermo, uno más abierto, más flexible, más diverso.

Cuarto, el triunfo se consigue con estrategia, teniendo las ideas correctas, sabiendo conectar, proponer y comunicar con claridad lo que verdaderamente crea valor, y llevándolo a la práctica con decisión y velocidad. “Siempre hay una mejor estrategia de la que tienes, solo que no la has pensado hasta ahora”, dijo Brian Pitman. Y eso fue lo que justamente hizo Lasso con su equipo luego de la primera vuelta. Tomaron decisiones correctas que los llevaron a ser valiosos para la sociedad ecuatoriana. Se apoyaron en las neurociencias para entender acertadamente a los ciudadanos, sus intereses y necesidades.

Quito, el triunfo se consigue trabajando juntos, cuando te rodeas de las personas correctas y te abres a sus opiniones y consejos. Vimos la campaña del encuentro con emprendedores, ecologistas, pescadores, agricultores, madres solteras, con muchos otros. La frase y propósito central de la campaña “Encontrémonos para lograrlo” refleja esa búsqueda de respetar y sumar en la diversidad, así como haber aceptado el apoyo de iniciativas ciudadanas por fuera de su partido. El triunfo se gestó cuando Lasso y su equipo reconocieron que solos pueden hacer poco, pero que juntos con los ecuatorianos pueden hacer mucho.

El triunfo de Lasso no es solo de él, es el triunfo del enfoque, del esfuerzo y la persistencia, de la humildad para mejorar, de sumar e integrar, de la estrategia, la comunicación clara y las ideas correctas. Es un triunfo alentador que sienta las bases para un proceso de encuentro nacional y que abre las posibilidades para afrontar la situación compleja del Ecuador –del presente y construcción del futuro– tarea que recién comienza. (O)