Los gritos de la gente alarmada por la balacera registrada en el Comité del Pueblo, el pasado 18 de junio, y el último caso de presunto sicariato en La Mariscal, son solo dos hechos recientes que incrementan la preocupación en Quito.
Quito está experimentando situaciones delictivas que no eran comunes en la capital y que incluso está llevando a que barrios adopten medidas y pidan más control policial.
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El mayor índice delictivo se concentra en dos distritos: Eugenio Espejo con 1.861 delitos cometidos desde el 1 de enero hasta el 16 de junio de 2023, y La Delicia, con 690.
Sin embargo, estos distritos cubren una gran cantidad de territorio de la capital. La Policía Nacional ha desarrollado un mapa de calor con las cifras de las zonas con mayor cantidad de delitos registrados.
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En el listado encabeza el sector de Iñaquito, seguido por La Mariscal. Los dos pertenecen a Eugenio Espejo. En tercer lugar se ubica El Mirador, del Comité del Pueblo, que pertenece al distrito La Delicia.
Víctor Herrera, comandante de Policía del Distrito Metropolitano de Quito, DMQ, señaló que el delito que más se comete es el robo a personas. Pero puntualizó que cada distrito tiene diferentes características, por el tipo de locales comerciales, cantidad de población, tipo de delitos, entre otros factores.
Iñaquito
La zona de Iñaquito está comprendida por el corazón comercial de la capital. A su alrededor se encuentran centros comerciales, entidades bancarias, instituciones públicas, privadas, el estadio Olímpico Atahualpa, parque La Carolina, restaurantes y zonas residenciales que han permitido que encabece la lista de la mayor cantidad de delitos. Las características del sector promueven a que sea la de mayor población fija y flotante.
El 27 de octubre de 2022 una mujer fue herida de bala en las inmediaciones de la Plataforma Gubernamental. La víctima había retirado dinero minutos antes de ser asaltada junto a su esposo.
La Mariscal
El sector de La Mariscal es conocido por la cantidad de bares, discotecas y restaurantes en distintas avenidas. También está conformada por una importante cantidad de edificios con oficinas públicas y privadas, entidades bancarias, centros universitarios, colegios, escuelas, y lugares de alta concentración de personas, como el coliseo Rumiñahui.
La pandemia perjudicó varios de los negocios de diversión, por lo que zonas como la Plaza Foch tienen problemas. Hay personas en situación de calle, el comercio informal prolifera y la delincuencia va en escalada.
Tampoco ha dejado de ser escenario de atentados, el último fue el presunto sicariato cometido en contra de un abogado, el viernes 23 de junio. El ciudadano ingresaba a un garaje cuando fue sorprendido por antisociales que le propinaron varios disparos.
Comité del Pueblo
En este lugar la dinámica es distinta. Es una zona alejada de los centros de negocios, diversión y comercio. En este sector del norte de Quito, la Policía ha identificado nichos de inseguridad por el microtráfico de droga y más delitos que nacen del control de territorios por la venta de estas sustancias.
El caso más relevante que se dio fue el pasado 18 de junio, habitantes de este sector se enfrentaron contra presuntos antisociales y quemaron la casa de una ciudadana que registra trece antecedentes penales. Durante la noche y madrugada se escuchó la detonación de bombas molotov y disparos de armas de fuego.
Más policías para Quito
El ministro del Interior, Juan Zapata; el alcalde de Quito, Pabel Muñoz y miembros del alto mando de la Policía Nacional presentaron a los nuevos 1.260 policías que reforzarán la seguridad en todo el DMQ, serán repartidos en los nueve distritos de manera técnica, respondiendo a las necesidades de cada sector, según se informó en el evento protocolario.
Pero ellos han recibido una capacitación cercana a los siete meses, por lo que no tendrían la experticia, según especialistas, para responder a ciertos actos delictivos o emergencias.
Ante esto, el comandante del DMQ, Víctor Herrera, explicó que se requiere una inducción progresiva, por eso se tiene previsto que inicialmente realicen patrullaje a pie, a horarios diurnos, en lugares que no tengan tanta incidencia delictiva. Por ejemplo: parques, corredores seguros de San Roque, San Juan, plazas de anta concentración de personas
Esta es la distribución de los nuevos agentes asignados en Quito:
Distrito | Policías designados |
---|---|
Eugenio Espejo | 216 |
La Delicia | 178 |
Calderón | 57 |
Tumbaco | 74 |
Los Chillos | 54 |
Quitumbe | 137 |
Eloy Alfaro (DMQ) | 179 |
Manuela Sáenz | 205 |
Nanegal | 10 |
Grupo Operativo Subzona | 150 |
Fuente: Ministerio del Interior |
En los lugares conflictivos tendrá que ir personal antiguo o incluso se ha dispuesto que para ciertos eventos acuda personal combinado, con nuevos agentes y otros con la experiencia necesaria.
Lo que sí ha pasado es que en los distritos de mayor cantidad de delitos se ha destinado más personal. Para el distrito Eugenio Espejo ingresaron 216 nuevos policías, mientras que al distrito La Delicia se decidió enviar 178 agentes.
Respuestas para reducir delitos
Para el experto en temas de seguridad Fernando Carrión en los sectores de alta centralidad urbana (Iñaquito y La Mariscal), se debería hacer un acuerdo de cooperación público-privada. Es decir, que policía y guardianía establezcan medidas conjuntas y se organicen para evitar el cometimiento de delitos, pues la mayoría se registrarían de lunes a viernes, cuando existe mayor presencia de posibles víctimas.
Sobre el caso del Comité del Pueblo, indicó que la dinámica es distinta. En este sector dijo que se ha instalado una estructura criminal, la que opera en el sector, y que solo podría ser enfrentada con labores de inteligencia.
En este caso puntualizó que el Municipio también podría colaborar con el control de comercio informal y permisos de uso de suelo.
Un depósito de armas fue localizado en Píntag, en el suroriente de Quito
La también especialista en asuntos de seguridad y carcelarios Alexandra Zumárraga agregó que el trabajo de las cámaras de videovigilancia es básico para colaborar con la vigilancia de los lugares. Pero que sí sería necesario que se complemente con un tema de prevención. Por ejemplo, señaló que el consumo de drogas es una de las principales razones para que se promuevan los delitos de robo a personas, asesinatos, entre otros.
En este caso puntualizó que el Ministerio de Educación y el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) podrían trabajar en campañas para disminuir el consumo.
También indicó que Quito, al ser la ciudad con mayor índice de desempleo es más propenso a que los ciudadanos opten por cometer delitos para su subsistencia.
Añadió que la mendicidad y explotación infantil en los semáforos es una tarea que el Municipio sí puede tomar como eje complementario.
Víctor Herrera recalcó que a pesar de que se habla de mayor percepción de inseguridad, la cantidad de delitos ha disminuido en comparación con el año anterior. Desde el 1 de enero hasta el 16 de junio de 2022 se registraron 7.141 delitos.
En lo que va del 2023, se han producido 5.602 delitos. Es decir, ha existido una disminución del 22 %, con 1.539 casos menos.
Esto no quiere decir que no exista una necesidad de presencia policial para labores de prevención de delitos, pues el número todavía es alto.
Por ello dijo que reforzar las Unidades de Policía Comunitaria (UPC), dotar de más motocicletas a la Policía y con el apoyo de empresas públicas y privadas sí lograrán conseguir que estas cifras delictivas disminuyan a corto y mediano plazo. (I)