El psicólogo de una unidad educativa privada de Cuenca es investigado por la Fiscalía del Azuay por presunto delito de abuso y acoso sexual a niños de 4 años. Según la versión de los padres que pusieron la denuncia, el adulto motivaba a los menores a realizar actos sexuales como besarse o tocarse las partes íntimas.

En contra de este psicólogo identificado como Jaime S. existen trece denuncias en la Fiscalía del Azuay, Doce por abuso sexual y una por acoso, según Leonardo Amoroso, fiscal de Azuay.

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En las primeras versiones de los padres de familia a las autoridades se reveló que los niños fueron motivados por este hombre de 35 años a hacer actos indebidos para su edad como besarse entre ellos y besarlo a él.

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Pero hay otras referencias más fuertes que las contó el abogado defensor de un grupo de víctimas, Luis Peñafiel.

“Son diversos los actos de naturaleza sexual, unos padres dijeron que les hacía besarse entre otros niños; otros, que él les besaba; otros, que les bajaba el pantalón y les tocaba el pene, y que son totalmente deplorables”, afirmó.

Con estos elementos las denuncias empezaron a presentarse en diciembre pasado en la Fiscalía y entre el 5 y 13 de ese mes se pusieron trece, lo que generó las investigaciones previas. Por ahora el psicólogo investigado está libre, pues aún no se ha abierto un proceso legal en su contra.

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Un elemento adicional que se conoció es que el acusado sí ha cumplido, hasta ahora, con los pedidos solicitados por la Fiscalía y en sus primeras declaraciones lo ha negado todo, también a través de su abogado defensor.

El tema fue conocido por la Coordinación Zonal 6 del Ministerio de Educación el 20 de diciembre de 2022 y se activaron los protocolos de atención.

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La coordinadora de la Zonal 6 no dio una entrevista al respecto porque estaba fuera de su oficina, pero desde esta entidad se informó que se aplicaron algunos protocolos y medidas de hecho, como separarlo inmediatamente de la institución en la que laboró durante cuatro años.

Según el fiscal Amoroso, la investigación de este caso podría durar hasta dos años, considerando que, según el Código Orgánico Integral Penal (COIP), cuando se comete un abuso sexual a niños menores de 6 años la pena que se prevé varía entre diez y trece años de privación de libertad. (I)