Negociaciones políticas entre bloques legislativos no se afectan con la liberación de Jorge Glas

La liberación del exvicepresidente de la República Jorge Glas no afectaría los acuerdos políticos en la Asamblea Nacional, donde se insiste en investigar y juzgar por incumplimiento de funciones a la presidenta del Parlamento, Guadalupe Llori (PK), que podría terminar en su destitución.

Mientras el sector del Gobierno continúa negando que hay un pacto político con el correísmo, las bancadas de Pachakutik, Izquierda Democrática (ID) y el Partido Social Cristiano (PSC) insisten en que el Ejecutivo canjeó la libertad de Jorge Glas por la vigencia de la ley tributaria.

Tres hechos clave registrados en la Asamblea Nacional sustentan la tesis de un acuerdo político entre el Gobierno y el correísmo

Tanto el PSC como el bloque Unión por la Esperanza (UNES), los denominados rebeldes de Pachakutik e incluso la ID consideran que la evaluación de las autoridades de la Asamblea debe continuar, independientemente de lo sucedido con Jorge Glas, pero también advierten la desconfianza con el sector del Gobierno.

La ID, según el jefe de bloque, Marlon Cadena, espera que los actores políticos de la Asamblea actúen con madurez y procesen adecuadamente los momentos políticos que vive el país, y eso significa no subirse a una aplanadora para el descabezamiento de las autoridades de control, que son de interés de algunos grupos legislativos.

Después de lo que ha pasado con el exvicepresidente Glas, la ciudadanía tiene que volver a recuperar la confianza en las instituciones, caso contrario se estaría viviendo un Estado fallido, advirtió Cadena, quien dijo que el diálogo entre las fuerzas políticas debe continuar, pero en el caso del Gobierno este debe entender que no se construye a gritos ni a puntapiés.

Si el Gobierno quiere conversar con la ID, tiene que ser un diálogo transparente y sobre la mesa con los medios de comunicación, no es posible hacerle juego a una práctica de artimañas. La burla cometida con la liberación del exvicepresidente Glas, no es a una organización política, sino al país que se siente ofendido en la moral y la ética, anotó.

En tanto, Juan Fernando Flores, coordinador de la Bancada Acuerdo Nacional (BAN), señaló: “Nosotros no pactamos con la corrupción, nosotros no pactamos con quienes han hecho daño al país y mucho menos llegamos a la política para hacer lo que durante tantos años se criticó”.

Insistió en que no existe ningún pacto, que no existe ningún acuerdo, no existe ningún elemento que de alguna manera pueda ser una forma de intercambiar absolutamente nada.

“Qué vamos a pactar en esta Asamblea Nacional si ni siquiera podemos sesionar, qué vamos a pactar si ni siquiera hay leyes que tratar, si además se rompe cada cinco minutos la legalidad como lo ocurrido en la sesión del CAL”, afirmó Flores, quien aclaró que su organización política reprocha la liberación de quien fue condenado por la justicia.

Respecto a la decisión del CAL de calificar la denuncia contra Guadalupe Llori, señaló que nuevamente irrumpieron los procesos legislativos, tras aclarar que no se niegan a una evaluación, pero dentro de la ley.

El Consejo de Administración Legislativa (CAL), presidido por el primer vicepresidente, Virgilio Saquicela, en la noche del 11 de abril, con cuatro votos calificó la denuncia presentada por el asambleísta Esteban Torres (PSC), por supuesto incumplimiento de funciones en contra de la presidenta de la legislatura, Guadalupe Llori.

Los cuatro votos vinieron de Ronny Aleaga (UNES), Johanna Moreira (ID), Darwin Pereira (Pachakutik rebeldes) y Virgilio Saquicela (IND). En la resolución aprobada se solicita que la presidenta, Guadalupe Llori, incluya lo más rápido posible en el orden del día la conformación de una comisión multipartidista para que procese la denuncia. En el caso de las dos denuncias en contra de los siete miembros del CAL, quedó en el limbo jurídico, porque los siete acusados se excusaron de conocer la denuncia que presentaron legisladores de BAN y UNES.

Llori consideró que lo resuelto por el CAL es un atropello al proceso y que la denuncia fue calificada con errores “garrafales”, que lo actuado no tiene ninguna validez, es nulo de nulidad absoluta; que no ha incumplido sus funciones como presidenta de la Asamblea, que la denuncia no tiene sustento alguno ni cumple con los requisitos.

“No voy a ceder a las agendas propias ni a los caprichos políticos de ciertas bancadas, no me voy a prestar para que desde la Asamblea se repartan el Ecuador”, puntualizó Llori al ratificar que no dará un paso al costado.

El coordinador del PSC, Esteban Torres, estimó que los acuerdos políticos externos no pueden influir en la Asamblea, pero que su organización política continuará hasta el final en su afán de investigar a la presidenta de la Asamblea. Que el acuerdo sobre la liberación de Jorge Glas involucra a dos sectores políticos que tendrán que responder a sus electores y al país, pero “que esto implique tumbar la autodepuración de la Asamblea, ese escenario no existe”, apuntó.

Sin embargo, anotó que solo las actuaciones y la votación en el pleno permitirán visualizar en qué lado se encuentran, la votación por la integración de la comisión para investigar a Guadalupe Llori será la prueba de fuego.

Rafael Lucero de Pachakutik también consideró que el pacto sobre la liberación de Jorge Glas no debe afectar los entendimientos a nivel legislativo, porque se hace necesario continuar con la agenda parlamentaria.

Dijo que son innegables las relaciones políticas externas del Gobierno con el correísmo, si no cómo se explica que el delegado del presidente de la República ante el SNAI no apeló o se opuso a la liberación del exvicepresidente. Todo eso devela el acuerdo, y si el primer mandatario dice que no hay pacto, entonces qué espera para no separar a ese funcionario del cargo, preguntó.

Juan Lloret de la bancada Unión por la Esperanza comentó que el legislativo tiene su propia dinámica y crisis, y está en camino un proceso de reorganización de las autoridades de la Asamblea, pues la crisis en la que está el Parlamento tiene nombres y apellidos, empezando por Guadalupe Llori.

Expresó que sobre la liberación de Glas la próxima semana pasará y quedará sepultado en la coyuntura política; que debe dedicarse la Asamblea a resolver los problemas de fondo como el desempleo y la reactivación, pero que eso se logrará con una recomposición de autoridades del legislativo. (I)