“Hoy sellamos un nuevo tiempo político, uno que no se definirá por discursos, sino por hechos, por decisiones valientes, por la capacidad de sostener juntos el rumbo que los ecuatorianos ya eligieron. (...) El Ecuador está escribiendo una nueva página, una sin caos, sin parálisis, sin insultos; una página de reformas profundas de apertura al mundo, de instituciones que se respetan y se complementan. (...) Vamos a ser una institución útil, vamos a legislar con sentido de urgencia, vamos a fiscalizar con responsabilidad y vamos a acompañar con visión de Estado”.