El aparente suicidio de un hombre turbó por algunas horas las actividades de los trabajadores del Palacio Legislativo y de los asambleístas que participaban en una plenaria, este 5 de marzo de 2024.
A eso de las 10:00 un trabajador del área de mantenimiento de la Asamblea Nacional había descubierto a un hombre que estaba suspendido de una de las vigas de la terraza del edificio y alertó a la Escolta Legislativa.
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El asunto se manejó con sigilo. Se contactó a la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida (Dinased) y a Medicina Legal para activar la respectiva investigación.
Un vehículo de Medicina Legal estaba en el parqueadero que da a la avenida Gran Colombia al centro norte de Quito y minutos antes del mediodía se llevó el cuerpo.
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Algunos trabajadores del área de limpieza esperaban poder ver algo, pero el personal forense apegó las puertas del carro a una de las salidas que evitaron las miradas de los curiosos.
En el ingreso al salón del pleno, los policías que dan seguridad al complejo discretamente evitaban que periodistas y visitantes crucen al ala oriental para evitar rumores.
Los murmullos se confundían con los gritos de alegría de grupo de representantes y activistas de la Fundación Consulting Group Ecuador que festejaban y se tomaban fotos tras haber recibido un reconocimiento de la Asamblea por su labor altruista con la población de pocos recursos.
Servidores caminaban por los pasillos, algunos alarmados y compungidos tras conocer que uno de sus compañeros, de quien hasta ahora no se conoce la identidad, fue hallado sin vida y preguntándose qué le había sucedido.
Otros confirmaban que personal de la policía llevaba evidencias del lugar del hecho y estaban impedidos de acceder al piso que dirigía a la terraza.
En el hemiciclo seguía el debate legislativo en un punto en el que el legislador Camilo Salinas (Construye), integrante de la Comisión de Deporte, exponía sobre la falta de investigaciones de las autoridades del Estado a la presencia de plomo en, al menos, seis productos que consumen los ecuatorianos.
Salinas reprochaba que el Ministerio de Salud no posee información respecto de cuántas personas, entre ellos niños, podrían tener en su sistema plomo de productos de venta al público que han sido observados por la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) y que efectos tendrían en la salud.
Para despejar los comentarios, minutos antes de las 13:00, en uno de los salones del Parlamento hubo una declaración de prensa de un minuto y siete segundos, en la que el comandante de la Escolta Legislativa, el coronel Francisco Zumárraga, acompañado de la vicepresidenta, Viviana Veloz, y otros coidearios, confirmaron el hecho, sin ahondar en más detalles porque está en indagación. (I)