A Awilda Vázquez la lloran en Puerto Rico, donde era un símbolo de la lucha contra el cáncer, enfermedad que venció en dos oportunidades. Ella, junto a su esposo, su hija y su yerno perdieron la vida de manera trágica en Republica Dominicana en medio de las copiosas lluvias que sorprendieron a ese país, donde en total murieron, al menos, 25 personas.

Awilda y su familia viajaron desde su isla del encanto a suelo dominicano. Iban unos días a Punta Cana.

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El sábado 18 de noviembre de 2023 en República Dominicana se sintió la furia de una tormenta tropical, que trajo fuertes lluvias “que llegaron a descargar 431 milímetros en ciertas áreas del sur y el suroeste del país y en Santo Domingo, lo que supone el evento de mayor precipitación pluvial en 24 horas en el país”, explicó el presidente Luis Abinader, citado en EFE.

Además de las pérdidas humanas, por esa suerte de diluvio, más de “17.855 personas fueron desalojadas (879 de ellas trasladadas a albergues), 3.571 viviendas quedaron afectadas, 45 poblaciones incomunicadas y ocho carreteras y seis puentes con daños (uno de ellos colapsó)”, resaltó la agencia española.

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Qué pasó con la sobreviviente de cáncer

En Santo Domingo, la capital, la noche del sábado 18 de noviembre, se desplomó “un tramo de la pared lateral de un paso a desnivel de la intersección de las avenidas 27 de Febrero y Máximo Gómez, que cayó sobre varios vehículos que circulaban por la infraestructura, afectada por las lluvias torrenciales que azotaban al país”.

Esa emergencia causó nueve muertes. En uno de los automotores se desplazaban Awilda, su familia y un amigo.

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Awilda superó el cáncer de ovarios. En junio de este año, Vázquez había donado 5,200 dólares al Hospital Oncológico de Puerto Rico en una famosa caminata que organiza el comunicador Raymond Arrieta cada año, para apoyar a pacientes con cáncer, publicó Diario Libre.

“Era una mujer de fe que amaba la vida, y batalló (…) Amaba a su familia, a sus hijos, nietos”, dijo una portavoz de la familia, según destacó Hoy.

Ese medio señaló que las otras víctimas mortales de la familia fueron Ramón Martínez, el esposo de Awilda; y la hija y el yerno de la admirada puertorriqueña, María Nereida Martínez y Michael Orozco Marín.

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“Esto no es fácil, se nos fueron cuatro familiares ”

Con la voz entrecortada por las lágrimas, Giordano Martínez dijo que lo que sucedió “no es fácil… fueron cuatro miembros de nuestra familia que no los vamos a ver más”.

“Qué hicimos como familia para merecer esto”, se preguntó, consternado, Giordano, en el programa Primer Impacto, de Univisión.

Ese espacio mostró cómo las paredes del túnel no resistieron la fuerza del agua y aplastaron a varios vehículos.

Con la familia de Awilda estaba Eduardo Cabrera, un urólogo dominicano. También falleció.

“El doctor recogió a mi familia en el aeropuerto, venían a la ciudad (Santo Domingo). Nadie podía imaginar algo así”, narró Giordano Martínez.

Awilda y su familia estaban de celebración

Los Martínez Vázquez llegaron a República Dominicana de vacaciones, informó Primer Impacto. Celebraban los 75 años de Ramón, el esposo de Awilda. “Él era el alma de la fiesta”, describieron allegados.

Además, la familia esperaba al nuevo miembro: al que crecía en el vientre de María Nereida.

“Ella no supo que tendría una nena. Nos enteramos cuando fuimos a reconocer los cuerpos”, expresó Giordano. Este hombre recordará a Awilda por su fe.

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“Awilda tenía una fe tan grande que creo que fue Dios quien la curó. Médicamente hablando no había posibilidad”, declaró.

Giordano está desconsolado. Sorprendido. “No voy a aceptar estas cuatro muertes… el día que las acepte será el día en el que se fueron para siempre y yo no quiero que eso pase”.

(I)

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