La comunidad internacional reacciona ante el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise, en su residencia privada de Puerto Príncipe en la madrugada de este miércoles.

El gobierno de Estados Unidos calificó de “horrible” el asesinato del presidente de Haití cometido y dijo que estaba dispuesto a ayudar en la investigación.

La secretaria de prensa, Jen Psaki, calificó el magnicidio perpetrado por asaltantes aún no identificados como un “ataque horrible”.

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“Ayudaremos de cualquier manera al pueblo de Haití, al gobierno de Haití si hay una investigación”, dijo, añadiendo que la Casa Blanca estaba “todavía reuniendo información” y que el presidente Joe Biden sería informado sobre el ataque en breve.

El alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, afirmó este miércoles sentirse “conmocionado” por el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise, y su esposa, y advirtió de que puede impulsar una “espiral de violencia”.

La secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA) condenó “en los más fuertes términos” hoy el asesinato “político” y lo consideró una “tentativa de socavar la estabilidad institucional del país”.

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En un breve comunicado, el organismo hemisférico calificó lo ocurrido como una afrenta “al conjunto de la comunidad de naciones democráticas” de la región.

“Condenamos en los más fuertes términos el asesinato del Presidente de Haití, Jovenel Moise, acto criminal ocurrido en la madrugada de hoy”, recalcó.

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“Rechazamos el cobarde asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise, y su esposa”, aseveró el presidente de Chile, Sebastián Piñera.

El presidente chileno concluyó con un llamado a “la unidad y la paz para fortalecer la democracia” y así poder “encontrar una salida a la grave crisis” que atraviesa el país, el más pobre de Latinoamérica.

El Gobierno argentino mostró su “más enérgico repudio” al asesinato de Moise y en un comunicado de su cancillería indicó que “espera que se recupere prontamente la paz y la tranquilidad en el país y pide respetar las instituciones democráticas”.

Mientras que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, envió un abrazo al pueblo de Haití y lamentó lo ocurrido. También recordó que Moise estuvo en el acto de su toma de posesión en diciembre de 2018, acompañado de su esposa, Martine Moise.

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“Recientemente estábamos por enviar 150.000 dosis de vacunas a Haití, que es un pueblo pobre, muy necesitado de ayuda internacional, y esto que sucedió es muy lamentable”, agregó en sus primeras palabras durante la conferencia diaria desde el Palacio Nacional.

Por todo ello, concluyó: “Le rendimos un homenaje, el pueblo y el Gobierno de México”.

El primer mandatario colombiano, Iván Duque, también se pronunció: “Rechazamos el vil asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise. Es un acto cobarde y lleno de barbarie contra todo el pueblo haitiano”.

El presidente Duque aseguró que su país respalda las instituciones y la democracia, y en ese sentido solicitó “a la Organización de Estados Americanos (OEA) una misión urgente para proteger el orden democrático” en Haití.

El mandatario dominicano, Luis Abinader, lamentó lo ocurrido y ordenó el cierre de los cuatro pasos fronterizos con Haití y dispuso el refuerzo de la vigilancia en la zona, según dijo un responsable del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront).

En Europa el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, dijo estar conmocionado por el hecho. Mientras que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, condenó el acto y envió condolencias al pueblo de Haití y la familia de Moise.

Haití atraviesa una fuerte crisis política desde mediados de 2018 y vivió su momento más grave el pasado 7 de febrero, fecha en la que Moise denunció que la oposición, con el apoyo de jueces, tramaba un golpe de Estado.

De forma paralela, el país sufre una honda crisis de seguridad, que se ha agravado en especial desde comienzos de junio por luchas territoriales entre las bandas armadas que se disputan el control de los barrios más pobres de Puerto Príncipe, según Efe. (I)