Se han vacunado e igual se han contagiado de COVID-19. Son los casos que se repiten y que ahora atienden médicos ecuatorianos, quienes recuerdan que la inmunización no libra de un posible contagio, sino que protege de que evolucione a una enfermedad grave que pueda llevar al paciente a hospitalización, a una unidad de cuidados intensivos o incluso a la muerte.