El mensaje que le llegó a su celular ni bien terminó el feriado de carnaval trajo a Éricka a la realidad económica de lo que la espera en pocas semanas: “Buenos días, señores padres de familia, pongo a disposición el servicio de expreso para este año lectivo. Entrego recibo o factura”. Un servicio que por dos años no usó, ahora deberá volver a contratar al retomarse las clases presenciales.