La economía verde fue la primera en abrirse camino hace más de diez años, cuando las actividades económicas relacionadas con la producción, distribución y consumo de bienes y servicios que no significaran impacto ambiental y ecológico empezaron a ganar notoriedad de la mano del concepto del desarrollo sostenible. Con el pasar de los años, otros colores se han ido sumando a esta clasificación, que a diferencia de la economía lineal, ubica tanto a los actores como a los elementos que mueven la economía sobre el capital.