El “quédate en casa” puso a correr a los servicios digitales que ya se ofrecían en sitios web y aplicaciones. El incremento abrupto de la demanda de febrero a marzo de hasta el 1500 % de los servicios a domicilio de víveres y medicinas a través de la web hizo colapsar, por ejemplo, las apps de las cadenas de farmacias que recurrieron al call center para atender los pedidos.