El Seguro de Desempleo sería financiado tanto por el 1% de aporte de los empleadores como por el 2% que constituye el aporte de los trabajadores, según el informe para primer debate de la Ley Orgánica para la Promoción del Trabajo Juvenil, Protección del Empleo y Seguro de Desempleo, que trata hoy el pleno de la Asamblea.

Dichos aportes son los que actualmente alimentan el llamado Fondo de Cesantía.

La propuesta plantea el pago mensual (a partir del cuarto del despido) de un valor proporcional del último sueldo que tenía el trabajador conforme a una tabla que va del 70% al 50%.

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El documento señala que el 1% de los aportes iría a un fondo solidario que financiaría, en todos los casos, el 70% de un salario básico unificado para el desempleado. Esto es $ 256 (si se toma en cuenta que el salario de 2016 asciende a $ 366).

Un segundo componente sería el aporte individual; con este se completaría el salario promedio total, en el caso de quienes ganaban más del básico.

En la última sabatina, el presidente Rafael Correa puso el ejemplo de un trabajador que ganaba $ 1.000 de promedio en el último año. Esta persona recibiría $ 700 en el primer mes de seguro de desempleo. Del fondo se obtendrían los primeros $ 256 y de la cuenta individual, los $ 444 restantes.

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En los siguientes meses (hasta el quinto mes de prestación) la cantidad por recibir va bajando hasta llegar a un 50% del salario que se percibía, pero el aporte del 1% queda fijo.

En el caso de quienes ganan el básico, todos los meses recibirán el 70% del SBU y no aportarán de su cuenta individual.

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Para Correa es importante destacar que aunque la persona no tenga nada ahorrado en su cuenta individual, siempre podrá recibir los $ 256 del fondo solidario. “Hay más seguridad, hay más justicia”, dijo.

Según el informe, los beneficiarios del seguro serían las personas afiliadas a la Seguridad Social en relación de dependencia que hayan cumplido 24 aportaciones acumuladas, de las cuales 6 deben ser continuas e inmediatamente anteriores a su despido. Deberán haber estado al menos 2 meses desempleadas y haber hecho la solicitud de la prestación a partir del día 61 del despido y hasta máximo 45 días posteriores de este plazo. El beneficiario no debe ser jubilado.

Xavier Sisa, representante del sector empleador ante el Consejo Nacional del Trabajo y Salarios, consideró que en este punto la redacción del informe ha quedado clara, pues antes no se entendía muy bien cómo funcionaba el financimiento.

Jaime Arciniegas, presidente del Parlamento Laboral, se mostró preocupado, pues insistió en que este seguro saldrá de los fondos del propio afiliado. Además comentó que no existe ningún estudio actuarial que establezca si los fondos aportados alcanzarán para este propósito o si tal vez resultarán demasiado abundantes.

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Mientras que Mesías Tatamuez, presidente de la Cedocut, propuso que los funcionarios de élite del Gobierno (presidente, ministros, asambleístas, entre otros) se reduzcan los salarios al 50% y del saldo se financie el seguro.

Tatamuez comentó que no se va a aceptar que se castigue al trabajador, pues el responsable de la crisis es el Gobierno y este sector debe hacer el sacrificio.

En cuanto al fondo de cesantía que ya está ahorrado, señala el informe de la Comisión legislativa, podría ser reclamado por el afiliado tras haber recibido el dinero del seguro y continuar desempleado. Y sobre los fondos ahorrados desde la vigencia de la ley, se indica que se podrá retirar el saldo al final cuando el afiliado se jubile. (I)

Proyecto
Detalles

Herramienta
Xavier Sisa, delegado de los empleadores ante el Consejo de Trabajo, dijo que se han puesto “demasiadas” restricciones a la reducción de la jornada laboral.

Maternidad
El presidente Rafael Correa anunció que pondría un nuevo artículo permitiendo que el descanso por maternidad sea de 3 meses con sueldo y de 9 meses más sin este.