Es un error pensar que mientras más crema humectante aplicas en la piel, más ayudas a mantenerla hidratada. Los expertos señalan que esta práctica puede tener consecuencias desfavorables para este importante órgano del cuerpo, el más grande, por cierto.

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En principio, una crema hidratante debe cumplir con dos requisitos básicos: hidratar y nutrir la piel.

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La aplicación de este producto cosmético debe responder a unas necesidades específicas, por ejemplo, resequedad por el cambio de temperaturas, daños por el paso del tiempo y la pérdida de colágeno; entre otros.

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Las cremas hidratantes faciales, explica El Diario, tienen una composición concentrada, por tanto, aplicar más cantidad del producto puede ser contraproducente y provocar daños en la piel, que no puede absorber el exceso de crema.

En lugar de humectar, el uso excesivo de cremas puede degenerar en resequedad de la piel. Foto: Kitzzeh

Consecuencias del uso excesivo de cremas en la piel

El uso en exceso de cremas en la piel puede provocar los siguientes daños o reacciones:

  • Obstucción de poros, donde se acumulan impurezas en la piel, obstruyendo los poros.
  • Como consecuencia de la obstrucción de poros o incluso, por predisposición, puede provocar la aparición de acné.
  • En lugar de humectar, el uso excesivo de cremas puede degenerar en resequedad de la piel, al impedir que ésta forme “una barrera cutánea eficaz”, explica El Diario.
  • El exceso de cremas hace que la piel se deteriore, llevando a su descamación, irritación o enrojecimiento.
  • Al aplicarte exceso de cremas la piel puede percibir que ya tiene suficiente agua, lípidos y proteínas y deja de producir humectación natural, refiere Mejor con Salud.
Cuida de no excederte en la aplicación de cremas en la piel. Foto: Pexels

Señales de cuidado

Estas son las cinco señales de que las cremas hidratantes u otros productos cosméticos que usas están afectando la piel, según advierte el experto en farmacia Pedro Catalá en Vanity Fair:

  1. Tono de la piel luce apagado.
  2. Irritación o enrojecimiento.
  3. Tirantez y sequedad al poco tiempo de aplicarla.
  4. Presencia de zonas del rostro congestionadas, como mejillas, nariz, barbilla y frente.
  5. Aparición de acné tras uso prolongado del producto.

Cómo aplicar las cremas en la piel

La Asociación Americana de Dermatología (AAD, por sus siglas en inglés) da las siguientes recomendaciones:

  • Aplica crema hidratante inmediatamente después del baño: de esta manera atrapas la humedad existente en la piel.
  • Usa cremas que contengan uno o más de los siguientes ingredientes: aceite de jojoba, dimeticon, glicerina, ácido hialurónico, ácido láctico, lanolina, aceite mineral o vaselina.
  • Usa solo productos para el cuidado de la piel suaves y sin fragancia.

(I)

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