Gustavo Moscoso no se inmuta cuando le hacen una pregunta que parece sonarle un poco obvia: ¿cómo este diseñador cuencano, con casi media existencia viviendo en Guayaquil (y en Samborondón), celebra las fiestas de Cuenca (que se recordaron en el presente feriado)? Tal vez es una pregunta que ha tenido que contestar más de una vez. Pero la respuesta no es cómo la anticipamos.