“Los chicos que van al Vicente (Rocafuerte) pueden bajarse aquí, porque nosotros ahora tenemos que ir por Esmeraldas. Así nos dijeron”, expresó ayer el conductor de un bus de la línea 41 al llegar a la esquina de las calles Alcedo y Carchi.

Habitualmente, esa línea giraba desde Alcedo por Carchi y avanzaba largo por esa calle hasta Padre Solano, para dirigirse hacia el centro de la ciudad. Pero desde el sábado esa y tres rutas más (la 98, 107 y 131 B) toman la calle Esmeraldas y por allí continúan hasta Quisquís, desde donde salen a Carchi para seguir sus recorridos.

Eso, como parte de la implementación del segundo corredor vial que empezó a regir desde finales de octubre pasado, con una primera fase que implicó el traslado de nueve líneas que cruzaban por José Mascote a la calle Esmeraldas.

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A raíz de ese cambio, Mascote se convirtió en unidireccional, en sentido norte-sur, pero se quedó con el flujo de nueve líneas de buses hasta el sábado pasado cuando esas otras unidades fueron reubicadas en la calle Los Ríos, como parte de una segunda etapa.

Esta fase incluyó un ligero ajuste en la ruta de las cuatro líneas que se dirigían por Carchi, pero que ahora deben tomar Esmeraldas hasta Quisquís.

“La verdad que no sabía de estos cambios, si el chofer no nos avisa nos íbamos de largo”, expresó el padre de un estudiante de un plantel cercano al Vicente Rocafuerte, que iba en el bus de la 41 y debió caminar siete cuadras para llegar hasta su destino. No obstante, si el hombre y su hijo avanzaban hasta Quisquís hubieran tenido que caminar solo tres cuadras.

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Fernando Amador, director de Transporte Público de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM), insistió en que ahora al ser Esmeraldas y Los Ríos preferencialmente para los buses urbanos (tienen dos carriles asignados en cada calle), el tráfico liviano puede usar como opciones García Moreno y José Mascote, respectivamente.

De hecho, cerca de las 11:00 de ayer, mientras el tráfico en Los Ríos era intenso en Mascote, la circulación era rápida.

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“Como ya no hay buses, uno anda más tranquilo”, comentó el taxista Miguel Ángel Reyes.

Un escenario similar se registró en García Moreno. No obstante, algunos conductores ponen reparos en usar esa opción porque el paso se interrumpe en la calle Hurtado, con la plaza García Moreno.

Allí, el Cabildo prevé habilitar un carril que dé salida a la av. 9 de Octubre. Otras rutas alternas en el centro de la urbe son Carchi, Tulcán, av. del Ejército, entre otras.

1.103 buses cruzan por las calles Esmeraldas y Los Ríos que son parte del segundo corredor vial. (I)

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