Hasta antes del 2010 la colombiana Sonia Segura se dedicaba de lleno a su faceta como productora de televisión y radio y periodista, pero una actividad que la apasionaba suplió todo y por eso atrás quedaron esos tiempos. Porque ahora su lugar de trabajo es detrás de un volante de los monster trucks.

De acuerdo con Segura, es la única mujer de su país y de Latinoamérica en conducir este tipo de automóviles. Indica que en Estados Unidos hay más de 15 mujeres que se dedican a ser pilotos de monster trucks, pero en “(Latinoamérica) por ahora soy yo la única mujer”, afirma.

Publicidad

La piloto de 19 años que se convirtió en la mujer más joven en completar sola la vuelta al mundo

Dejar su trabajo estable fue un tanto complicado, pero cuando llegó el momento de tomar la decisión apostó por lo que realmente quería hacer, una determinación que también era difícil de comprender para su entorno, principalmente el familiar, porque se trataba de ir por un camino que podría ser considerado un hobbie.

En un inicio formaba parte de su trabajo el estar involucrada en eventos de exhibiciones de carros, y es allí donde conoció los monster trucks. “Como me gustaba tanto el tema de carros, yo abrí una página web que tenía que ver con carros y cuando llegaron los monsters a Colombia pues vi la oportunidad de poder ir a cubrir el evento para mi página. Empecé a entrevistar a los dueños de los camionetas, ellos vieron el interés que tenía, vieron que yo hablaba un poco más técnico y me invitaron para ver el montaje del show de ellos, yo fui, los conocí y después me empezaron a gustar muchísimo más los carros y me dije: ‘yo quiero estar aquí’”, relata Segura.

Publicidad

Y así fue. Se inclinó por la actividad de ser conductora de este tipo de vehículos. Empezó a ir de gira y a vivir una serie de experiencias.

Es un campo que ha sido dominado por los hombres, pero eso no ha sido obstáculo para Segura, de hecho ha recibido el apoyo y admiración de ellos. “No ha sido difícil porque no he tenido que luchar por los espacios, porque yo creo que las cosas se logran demostrando lo que uno es capaz de hacer y cómo lo hace. Ha sido el apoyo de amigos hombres los que me han impulsado a hacer todo esto”, sostiene.

María y Jazmín, primeras pilotos de guerra en Ecuador

La colombiana comenta que el dueño de las camionetas, el estadounidense Steve Harley, fue quien le dio la oportunidad de ser capaz de manejar esa clase de vehículos. “Fue desde el 2010 que yo empecé a aprender a estar con ellos, a perder ese susto, por decirlo así, porque a uno lo intimida el tamaño de los carros, el tamaño de las llantas, el ruido de los motores, pues uno como mujer piensa que de pronto esto no es un trabajo para mujeres y como muchas personas inicialmente también lo vieron”, explica.

“Pasé de la producción de un programa de un ministerio en donde todo el tiempo yo estaba peinadita, bien vestidita, limpiecita, a un trabajo donde es completamente diferente todo, porque igual yo no soy mecánica, pero ayudo con el mantenimiento de los carros, cojo las herramientas, la cara a veces la tengo sucia, el cabello, la ropa. Pues fue un cambio brusco para muchas personas, sobre todo para mi familia, mi mamá que era: ‘ay, usted, parece un niño’ y yo no veía problema a eso, más bien el apoyo de mi hermano y mi papá, que decían: ‘déjale, pues, eso es lo que le gusta’. Y así ha sido, el apoyo de Steve, de mis amigos, de mi familia. A veces como mujeres nos criticamos fuerte, entonces mis amigas, algunas me decían: ‘oiga, usted cómo se ve, no se preocupa’. Ha sido más el apoyo de los hombres y las cosas que de pronto me critican es lo que me da más impulso para decir: ‘yo no tengo por qué dejarme llevar por prejuicios’”, agrega.

Y se mantiene firme en lo que cree, que una persona debe hacer lo que le gusta y dejar los estigmas a un lado. “Yo tengo en este momento 50 años y uno no se puede poner a pensar o que es muy tarde para hacer las cosas o que de pronto estoy haciendo las cosas a temprana edad. Creo que uno simplemente tiene que hacer las cosas en el momento y no esperar tampoco, porque uno no sabe si más adelante va a tener la oportunidad. Entonces, uno como mujer tiene que arriesgarse”, señala.

“Yo no estoy de acuerdo, por ejemplo, con que uno como mujer para reclamar derechos tenga que hacer protestas, porque uno los derechos simplemente se los gana por los méritos que uno tiene y por lo que uno hace. Yo no soy de las personas que piensan que uno tiene que demostrar, porque yo en realidad no le tengo que demostrar nada a nadie, yo lo que tengo que hacer es mostrar lo que soy capaz de hacer, entonces eso es lo que muchas mujeres tienen que pensar en eso”, analiza.

Foto: Cortesía

Para su preparación, confiesa que no es muy “fitness”, sin embargo, dice que su preparación es más mental, porque hay una presión “de todas formas grande” al estar frente a muchas personas que están viendo que es una mujer la que está manejando y que así como hay la expectativa por verla, también está el otro lado, la incredulidad de una minoría que piensa que no lo hará bien. “Yo tengo que manejar un carro de 1.300 caballos de fuerza, una camioneta que pesa siete toneladas, que mide más de tres metros. Entonces, sí tiene que prepararse física y psicológicamente antes de cada evento”, recalca.

Las camionetas que conduce son completamente tubulares, según comenta Segura, y dice que como parte de las medidas de seguridad cuentan con un cinturón de cinco puntos que los ajusta “muy bien contra la silla”, tiene una cuellera, que ayuda a contener el cuello, y a ello se suma el casco.

Asimismo, expresa que los vehículos tienen un control remoto, que si por equis motivo el piloto pierde el conocimiento, a través de este dispositivo se puede apagar la camioneta. Debe estar atenta de la caída del carro para poder controlarlo.

Ha paseado por varias pistas, pero tiene pendiente Estados Unidos, aunque nunca ha estado por allá.

Segura es una de las invitadas a Monster Trucks Ecuador, que se realizará el sábado 10 de septiembre en la Explanada El Dorado (vía La Aurora), a partir de las 16:00. Las puertas se abrirán a las 15:00.

Costo de las entradas: godzilla, palcos para cinco personas, $ 420; dragona, palcos para cinco personas, $ 275; y general monster por orden de llegada, $ 27. Se puede adquirir en www.centraltickets-ecuador.com. (I)