“Una vez tuve el sueño de ser un elfo... Crecí pobre en un pueblo de una montaña en Puerto Rico, luchando por encontrar mi voz. Este sueño mío parecía imposible, y fui burlado y se me dijo: “No puedes ser un elfo. No hay elfos negros. No hay elfos latinos””, recordó el actor Ismael Cruz Córdova en Instagram semanas antes del estreno de Los anillos de poder, la serie de Prime Video en la que él tiene uno de los estelares, como el elfo Arondir.
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En algún momento, cuenta, se convenció de que era un deseo ridículo, y lo escondió. Pero con el tiempo recuperó su deseo de imaginarse, de ocupar espacios, de ser visto como sujeto, humano y participante. “He mantenido vivo mi sueño élfico. Y aquí estoy. Negro, latino, puertorriqueño, orgulloso y elfo”.
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La revista Time, en su portada de septiembre, lo invitó a compartir con otros de los nuevos rostros de Los anillos de poder, y presentó a Cruz como “una elección ideal”, la primera persona negra en interpretar a uno de los elfos de Tolkien en la pantalla... después de ser rechazado varias veces. Se presentó a las audiciones una y otra vez durante siete meses.
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“Hay trolls en la vida real, que tienen problemas con el hecho de que Cruz Córdova, un puertorriqueño negro, sea un elfo”, señala el reportaje de Time, pero el actor dice no tener energía que dedicarle a eso. Ha estado ocupado, por ejemplo, siendo una de las estrellas en la Comic Con de San Diego.
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Si bien en el universo ficticio de El señor de los anillos se habla de un grupo de ‘elfos oscuros’, el término no alude a la apariencia sino al hecho de que su conocimiento e iluminación no eran tan avanzados como el de otros grupos (los altos elfos). En la imaginación popular, los elfos son criaturas de gran belleza, elevada estatura y tez clara.
Otros actores negros han sido invitados a la producción. Una de ellos es la actriz y cantante sudafricana-iraní Sophia Nomvete, quien interpreta a Disa, esposa de Durin, futuro rey de los enanos. No es solo una enana con la piel oscura, es la primera enana en ser identificada como tal (en la obra original solo se menciona a los varones, y de ellas se dice que tienen barbas y que rara vez salen de sus casas). Disa no tiene barba y tampoco se esconde, es amigable con los extraños, lista para las visitas y para hacerse oír, pues tiene una poderosa voz capaz de resonar contra la piedra de las montañas.
Pero también está Sir Lenny Henry como Sadoc, un Harfoot que actúa como astrónomo y guía de su pequeña tribu, aunque su mezcla de conocimiento natural y superstición lo hacen proclive a dejarse engañar o asustar. El comediante Henry, de 64 años, caballero de la Orden del Imperio Británico, es además canciller de la Universidad de Birmingham. Pero además, es escritor, y la defensa de la vida de las personas negras es una de sus temáticas principales.
Y con ellos está la reina Tar-Míriel, trabajo de la estadounidense de origen ghanés Cynthia Addai-Robinson (La ley y el orden, CSI Miami, Spartacus, Arrow). Aunque Míriel es humana, eso no ha librado a la actriz del descontento de un sector del fandom que siempre ha pensado en los reyes humanos de la Tierra Media como lo más parecido a los elfos, y por tanto, de piel clara.
Cruz, Nomvete, Henry y Addai-Robinson son las caras más destacadas de un elenco que tiene la intención de ser diverso, de dar protagonismo por momentos a hombres, mujeres y razas no humanas, y de dar desarrollo a sus personajes –con tal de que no sean orcos. (E)